Reunión del Consell Executiu

El Govern niega que haya un 'intercambio de cromos' entre los presupuestos y la reforma de la sedición

El Executiu ensaya los mecanismos de una posible prórroga de los presupuestos insuflando vía decreto 375 millones a la sanidad catalana

La portavoz del Executiu recuerda que el pacto de julio de la mesa de diálogo sobre la desjudicializaciòn vence con el año

Pere Aragonès, acompañado de la ejecutiva del Govern

Pere Aragonès, acompañado de la ejecutiva del Govern / EFE /Alejandro García

Xabi Barrena

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Separar los acuerdos en materia de desjudicialización de las negociaciones para los presupuestos del Estado y de la Generalitat se ha convertido en el mantra de la semana. Preguntada abiertamente sobre una más que posible relación entre una y otra carpeta, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, aseveró que "no hay ningún 'intercambio de cromos'. No tiene nada que ver". Plaja, en el momento de abordar el plan del Gobierno para reformar el delito de sedición para homologarlo con las tipificaciones habituales en los países de la Unión Europea, se remitió al pacto cerrado en la tercera edición de la mesa de diálogo, negociación y pacto sobre el conflicto catalán, del pasado mes de julio.

En aquella ocasión ambos ejecutivos se comprometieron a abordar la desjudicialización "mediante las modificaciones legislativas necesarias", recordó Plaja antes de subrayar : "Y antes de fin de años". La portavoz se remitió a los distintos informes de altas instancias internacionales, como las Naciones Unidas y la Asamblea de Parlamentarios del Consejo de Europa para sentenciar que "el déficit democrático del Estado es evidente" y que corre a cuenta del Gobierno del Estado revertir esta situación.

No dio la portavoz ningún detalle más sobre la cuestión del delito de sedición, por cuanto, dijo, "ambos gobiernos trabajan discretamente y así debe ser".

Por otra parte, el Govern ha insuflado 375 millones más a la sanidad catalana, fruto del buen rendimiento de los tributos propios. Puede entenderse este movimiento como un ensayo del Executiu porque este sería su proceder en caso de que se prorrogaran los presupuestos de la Generalitat. Este decreto debe ser ahora convalidado, antes de 30 días, en el Parlament.