Según el CIS

El 'efecto Yolanda Díaz' se frena en pleno lanzamiento de su nueva plataforma

La valoración de la vicepresidenta segunda por parte de la ciudadanía ha ido descendiendo en los últimos meses

Yolanda Díaz

Yolanda Díaz / David Castro

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Durante unos meses, Yolanda Díaz logró ser la única líder política que obtenía el aprobado de los ciudadanos. Fue en los meses de marzo, abril y mayo de este mismo año cuando la vicepresidenta segunda del Gobierno superó el cinco -algo que muy pocos políticos logran-, según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Sin embargo, esos tiempos parecen haber acabado. Aunque sigue siendo la dirigente mejor valorada, el 'efecto Díaz' se ha frenado en los últimos meses, justo en pleno lanzamiento de Sumar.

El barómetro de octubre publicado este lunes por el CIS le otorga a Díaz un 4,71. Seis décimas menos que en marzo, cuando logró alcanzar el 5,36, una puntuación que ningún otro dirigente ha logrado a lo largo de esta legislatura. No obstante, la valoración de la vicepresidenta se ha ido desplomando mes a mes desde entonces hasta situarse en cifras similares a las que obtuvo en el verano de 2021, cuando el CIS empezó a preguntar por ella tras relevar a Pablo Iglesias en el liderazgo del ala morada del Gobierno.

En febrero, el estallido de la guerra en Ucrania obligó a Díaz a posponer el lanzamiento de su proceso de escucha que se había retrasado ya en varias ocasiones. Sin embargo, la vicepresidenta venía de aprobar la reforma laboral en febrero, lo que la llevó a alcanzar su récord personal. El mes siguiente comenzó el declive y Díaz obtuvo su último aprobado, un 5,05.

Paralelo al proceso de escucha

El estreno de Sumar, el 8 de julio en Madrid, no sirvió para devolverle las antiguas cifras. Lejos de ello, logró un 4,81, según el barómetro de ese mes. En aquel acto, Díaz explicó que su intención es recorrer toda España a lo largo de este 2022 para escuchar a los colectivos sociales y confeccionar con ellos un "nuevo contrato social" para la próxima década. El primero de estos actos fue en Madrid y después ha pasado por Galicia, el País Vasco, Asturias y Catalunya. Sin embargo, no parece que el proceso de escucha esté generando el interés que esperaba. Desde el comienzo del verano ha perdido dos décimas.

La bajada de Díaz tan solo es comparable a la del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que en abril -la primera vez que el CIS preguntó por él- fue valorado con un 5,20 y este mes ha recibido un 4,42. Aún así, ambos casos son diferentes. Mientras que el dirigente del PP obtuvo ese aprobado nada más llegar a la presidencia del partido y sin tiempo de que los ciudadanos analizaran su gestión, Díaz alcanzó su mejor marca tras meses de estar al frente de los morados en el Ejecutivo.

La marca electoral

Por el contrario, el 'efecto Díaz' sí parece beneficiar a la marca de Unidas Podemos. En julio, coincidiendo con la presentación de Sumar, los morados lograron una estimación de voto del 13,4%, lo que suponía una subida de más de 3,5 puntos respecto al mes anterior. Aunque esa fiebre parece haberse relajado, Unidas Podemos lleva los dos últimos meses estabilizado en torno al 12,7%.

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