Alba Vergés echa a cuatro de los seis asesores de Laura Borràs en el Parlament

La vicepresidenta primera con funciones de presidenta en el Parlament, la republicana Alba Vergés, ha firmado el cese de cuatro de los asesores de Laura Borràs que estaban en un limbo desde que la líder de Junts fue suspendida el pasado 28 de julio. Los otros dos cargos de confianza se integrarán en el engranaje de la Cámara catalana, pero no ha habido acuerdo con el resto porque, a pesar de que la posconvergencia considera que jurídicamente deberían continuar todos porque Borràs no ha sido cesada, ERC y la mayoría de la Mesa comparten que no hay encaje posible de los que tienen más peso político.

Así pues, a partir del 30 de septiembre, el jefe de gabinete, Salvador Esteve; el jefe de prensa, Pep Elias; y los asesores Oriol Izquierdo y Narcís Junquera dejarán de ser oficialmente trabajadores de la institución. Inicialmente, ERC había propuesto que fueran cesados tres, los considerados de más proximidad política y personal con Borràs, pero finalmente solo permanecerán la responsable de gestión, Elvira Parés, y el técnico asesor Frances López, que dentro de la Mesa se encargarán de funciones del gabinete de presidencia que se tienen que continuar haciendo aunque se alargue la interinidad en la jefatura de la Cámara, como trabajos de secretaría, de revisión de órdenes del día, preparación de audiencias o preparación de actos que acoge el Parlament.

Fuentes parlamentarias explican que se puso "voluntad" en explorar un encaje para todos y que se habló personalmente con las seis personas afectadas, pero la conclusión fue que, por motivos de confianza, pero también por las funciones de cada uno, "no todo era encajable", sobre todo aquellas más estrechamente vinculadas a la figura de la presidenta. Vergés, que como vicepresidenta tiene dos asesores, no prevé contratar a nadie más, puesto que no está entre sus planes ejercer la representación de la institución como si fuera ella la jefa de la Cámara y calcula que habrá menos actos institucionales que con una presidencia funcionando con normalidad.

La decisión de Vergés de cesar a cuatro asesores cuenta con el apoyo de la mayoría de la Mesa, pero no de Junts ni de Borràs, que entienden que no se debería haber producido su suspensión ni se tendrían que haber echado a ninguno de sus asesores, que tampoco querían dimitir. Los cesados no tendrán derecho a indemnización, pero sí podrían ser de nuevo contratados si Borràs regresa a la presidencia porque no hay sentencia condenatoria o bien si les reclama un nuevo presidente de Junts en caso de que se produjera un relevo que por ahora no está previsto.