Onze de Setembre

Òmnium riñe a la ANC y a los partidos por la tensión cainita de esta Diada

Xavier Antich llama a abrir un nuevo ciclo del independentismo con la aportación de nuevas voces

El presidente de Òmnium, Xavier Antich, aplaude al finalizar el acto convocado en el Arc de Triomf durante la Diada Nacional de Catalunya

El presidente de Òmnium, Xavier Antich, aplaude al finalizar el acto convocado en el Arc de Triomf durante la Diada Nacional de Catalunya / JORDI COTRINA

Xabi Barrena

Xabi Barrena

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“¿Cuándo decidimos ceder a la tentación de enfrentarnos entre nosotros?” . Esas fueron las primeras palabras del presidente de Òmnium, Xavier Antich, en el acto político de la entidad en la Diada. Fue una exclamación a lo Zavalita --en ‘Conversación en la catedral” de Mario Vargas Llosa, con aquel ‘¿cuándo se jodió el Perú?”-- y que interpelaba directamente a los dos frentes en que se ha dividido el independentismo. Por un lado, la ANC y su voluntad de “pasar por encima de los partidos” y, por el otro, los partidos, en especial, ERC, que lidera la presidencia de la Generalitat.

“No hay ningún pueblo que pueda decidir su futuro sin instituciones o partidos. Nunca cederemos a la tentación populista de la anti-política”, siguió Antich, tras explayarse en la descripción del momento de “paralisis” en que se halla el independentismo. Un parón que amenaza, aseveró, con convertirse en estructural, y que “desmoviliza”, a menos que se proceda a una “reactivación”. 

Según la diagnosis de Antich, "no hay estrategia compartida, ni objetivo común. Solo hay estrategias de parte, lo que causa desánimo y mucha desorientación". "Estamos donde nos quiere el Estado, paralizados y ello solo alimenta la desconfianza".

"Habíamos llegado muy lejos", lamentó, nostálgico, el sucesor de Jordi Cuixart. Y es que Òmnium considera esencial repetir el triángulo compuesto por partidos, instituciones y sociedad civil que permitió la celebración del 1-O, que fue “un éxito colectivo, fruto de una década de organización y coordinación transversal”, señaló Antich. Eso sí, exclamó: "Cinco años después del 2017 hay que mirar adelante".

La propuesta de Antich, no concretada, es abrir las ventanas y dar paso al aire fresco. A nuevas voces. "El desacuerdo está provocando un replegamiento de los actores del independentismo. Hay que cambiar la dinámica y apostar por la apertura", señaló.

"Cinco años después del 1-O, hay que mirar adelante", aseveró el líder de Òmnium

Una especie, se supone porque no lo mencionó, de refundación del consejo estratégico de dirección del independentismo, el órgano que agrupaba a los tres partidos parlamentarios, a las dos entidades principales del soberanismo y al neonato Consell per la República, con la aportación de estos nuevos agentes, siempre independentistas. Nótese el uso del pasado, es decir, que ‘agrupaba’, porque el órgano no se reúne desde el 2021.

El consejo director nació en la primavera del 2017 como un órgano asesor del Govern, a la vista de las malas relaciones entre el ‘president’ Carles Puigdemont y el vicepresidente, Oriol Junqueras, a poco menos de seis meses del 1-O. Con el paso del tiempo y el progresivo alejamiento (sí, aún más) de ERC y Junts, unos y otros le han dado un significado distinto. Mientras Junts trata de que sea este consejo el que dirija los pasos del independentismo --y si puede ser bajo la tutela del CxR que fundara Puigdemont, mejor--, los republicanos, como apuntó Oriol Junqueras en la entrevista a EL PERIÓDICO, considera que no hay mejor dirección que la que elige la ciudadanía. Es decir, el Govern, es decir, Pere Aragonès, ‘president’.