Conmemoración del atentado en Barcelona
Barcelona rinde homenaje a las víctimas del 17-A pese a la tensión creada por un grupúsculo independentista
Fidel Masreal
Periodista
Licenciado en Ciències de la Comunicació por la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), curso de periodismo jurídico-político por la UAM-El País, ha ejercido como periodista político en Onda Cero, diari Menorca, Ràdio Barcelona (cadena SER) -donde fue jefe de la sección de Política- y Els Matins de TV3. Desde septiembre del 2008 es redactor en El Periódico, primero como cronista parlamentario en Madrid y en la actualidad especializado política catalana. Autor de "Conviure amb la depressió" (Mina, Eniclopèdia Catalana, 2007), "Game Over: els partits polítics, corrupció i vicis del sistema" (La Mansarda, 2013), "Cuentos Ex" (Magma Editorial, 2019) y "Contes del procés" (Magma, 2019). Colabora como analista en TVE, Catalunya Ràdio, SER Catalunya y RAC-1, entre otros.
Poco se imaginaban Lourdes y Albert, que salvaron la vida de milagro en el atentado de hoy hace cinco años, que saldrían del homenaje a las víctimas de la Rambla abroncados por un grupúsculo de independentistas radicales. Con camisa blanca, el pin de las alas blancas de Xavi -el niño de tres años que murió ese día- Lourdes y Albert han vuelto a hacer el recorrido que trazó, zigzagueando, la furgoneta conducida por el terrorista. Hasta el Pla de l'Os, donde junto al mural de Miró reza la frase "Que la pau et cobreixi, oh ciutat de pau". Allí víctimas como ellos y otras venidas de Australia, Alemania o los Países Bajos han recibido el homenaje de la ciudad y las instituciones. Homenaje que un grupo de personas ha tratado de boicotear con gritos incluso durante el minuto de silencio. La indignidad ha llegado al punto de que algunos de los manifestantes han increpado a los familiares tras la conmemoración. Y pese a todo ello, los boicoteadores han recibido el abrazo y el apoyo explícito de la destituida presidenta del Parlament y presidenta de Junts, Laura Borràs. Junts ha tenido que emitir un comunicado de condena.
Solo había que ver a la madre de Julian, el niño australiano de siete años asesinado también ese día, llorando desconsoladamente agarrada a la foto enmarcada de su hijo y al clavel blanco, para darse cuenta de la densidad de la emoción en el homenaje. Como siempre, Robert Manrique, de la UAVAT (la organización que coordina la atención a los afectados por los atentados), ha estado junto a las víctimas, dispuesto siempre a abrazarlas y a denunciar falta de atención hacia ellas. La alcaldesa Ada Colau, visiblemente emocionada, saludaba también a los protagonistas del acto.
Las víctimas, en shock
Pero minutos antes de comenzar el acto, que ha consistido en la interpretación de dos canciones por parte de la coral Vozes y la lectura de un poema de Espriu por parte de la presentadora, Fàtima Saheb, ya han empezado a aflorar los papeles con el lema "exigimos la verdad" y los gritos. Gritos durante el acto y durante el minuto de silencio, acusando al Estado de todo lo relacionado con el atentado.
La tensión ha ido más allá e incluso algunos de los que han roto el respeto del momento se han atrevido a encararse con los familiares de las víctimas y los heridos, con reproches de todo tipo. Uno de los increpados ha sido Albert. Indignado, ha pedido explicaciones a los manifestantes y les ha recordado que él sí estuvo en la Rambla ese día y salvó la vida por poco.
Los familiares, perplejos
Tras estos incidentes, Robert Manrique ha explicado que los familiares han quedado impactados, en shock. "¿Cómo explicar a esta gente, que ha venido de Australia, de Bélgica, lo sucedido? La próxima vez, que piensen en las víctimas, hay momentos y momentos", ha lamentado, mientras todavía Borràs seguía allí, a pocos metros.
En cuanto al acto en sí, una vez más todos los representantes políticos han quedado en segundo plano. Y por deseo de las víctimas, han sido dos ñiños, de la edad de los dos que fueron asesinados ese día, los primeros en realizar la ofrenda floral. Tras ellos, todos los representantes de instituciones, entidades y víctimas. En un silencio respetuoso. Como cada año. Entre ellos, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau junto al consistorio municipal en pleno, el 'president' Pere Aragonès, los ministros Miquel Iceta y Raquel Sánchez, y miembros del Parlament, encabezados por la vicepresidenta segunda, Assumpta Escarp, y la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, entre otros.
Una condena casi unánime
Fuera ya del foco mediático, Lourdes, Albert y otras familias vestidas de blanco se han marchado, perplejas pero consoladas por algunos vecinos de la ciudad. Las muestras de condena a lo sucedido se han ido multiplicando, pese a que Borràs y su entorno de fieles no han dado ni una muestra de autocrítica. Junts sabe que tiene un problema.
De vuelta a la realidad, a la Rambla, un agente de la guardia urbana recordaba que estuvo ahí mismo hace cinco años. "Tuve la oportunidad y satisfacción de hacer todo lo que pude", explicaba circunspecto, resguardando la emoción tras las gafas de sol. Dicho lo cual, ha callado.
- BarcelonaVídeo | Las olas causadas por la borrasca 'Nelson' vuelven a comerse las playas de Barcelona
- Tráfico y transportesEstos son los cambios en el permiso de conducir para los mayores de 70 años
- DeportesEl dueño de la Fórmula 1, cerca de cerrar un acuerdo para comprar MotoGP por 4.000 millones de euros
- SociedadCuando el 'bullying' lleva al suicidio: el lado más crudo del acoso escolar
- Ocio y CulturaMuere la periodista Anna Pérez Pagès, rigor y compromiso con la cultura
- SociedadDestrozos, puñaladas y "fiestas con escorts" en los nuevos rascacielos de lujo de Madrid: "Me fui por miedo
- SociedadDani Alves acude a firmar a la Audiencia de Barcelona para cumplir con las medidas impuestas para su libertad
- SanidadLa tosferina se dispara en Catalunya: los casos de este año ya multiplican por 13 los de todo 2023