Decisión judicial

Imputados los autores de tuits contra la familia de Canet que pleiteó por el 25% en las aulas

La fiscalía denuncia que los mensajes pretendían vejar a los padres y asilar al menor para lograr su "exclusión social" por el hecho de "ejercitar su derecho" a usar el castellano

Una madre acompaña a sus hijos a la escuela Turó del Drac de Canet de Mar, en cuya entrada luce una pintada que reclama la enseñanza en catalán

Una madre acompaña a sus hijos a la escuela Turó del Drac de Canet de Mar, en cuya entrada luce una pintada que reclama la enseñanza en catalán / ACN / JORDI PUJOLAR

J. G. Albalat

J. G. Albalat

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El Juzgado de Instrucción número 12 de Barcelona ha citado a declarar en calidad de imputadas a cuatro personas que publicaron en la red social Twitter expresiones que, según la fiscalía, son "humillantes e hirientes" contra la familia de un menor de edad escolarizada en el colegio Turó de Drac de Canet de Mar y que promovieron la demanda que logró que el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) obligara al centro a impartir el 25% de las clases en castellano. Algunos de los encausados hicieron un llamamiento a aislar a ese alumno, mientras que otro apuntó expresamente a la familia afectada, con nombres y apellidos.

El juez Sergio Escalona ha citado a declarar a los cuatro imputados para los próximos 1 y 5 de septiembre y ha solicitado al TSJC testimonio de la sentencia del 25% de castellano en la escuela de Canet de Mar y la providencia del alto tribunal en la que se requería a la Conselleria d'Educació y al director del centro para que adoptara las medidas necesarias para preservar la protección e intimidad del menor.

La investigación judicial se ha incoado a raíz de la denuncia presentada por el fiscal contra los delitos de odio de Barcelona, Miguel Ángel Aguilar, que atribuye a los cuatro imputados, sin perjuicio de la instrucción de la causa, un delito de lesión de la dignidad por motivos discriminatorios, en concurso con otro contra la integridad moral.

La acusación pública sostiene en su escrito que los acusados procedieron a señalar a la familia del menor de forma "expresa" en represalia por haber pedido la aplicación de la sentencia del TSJC, con la pretensión" de "humillarla y vejarla", aislar al menor respecto a sus compañeros de colegio y, por lo tanto, su "exclusión social" por el hecho de "ejercitar su derecho" a usar la lengua castellana en los términos establecidos por el alto tribunal.

"Angustia y zozobra"

Con este proceder, en opinión de la fiscalía, los denunciantes perseguían generar en la familia "sentimientos de angustia, zozobra y amedrentamiento" que les hiciera desistir de su pretensión, "sirviendo", además, "de aviso" para otras personas que "pudieran tener idénticos planteamientos lingüísticos". "En este contexto de hostigamiento", incide la acusación, y "buscando ese efecto de aislamiento de la menor", los imputados lanzaron mensajes como: "Entonces cree el grupo P5Ñ, poner al niño solo y le hacéis 50-50".

"Por favor, queremos saber el nombre y la dirección donde vive la familia", "la culpa no es de la escuela. La culpa es de la familia que ha hecho la denuncia" o "los canelones los haremos de carne de niño castellanohablante, como se ha hecho toda la vida", son otros de los tuits.

"Todos los denunciados no han retirado estos mensajes, al menos hasta la fecha en que se concluyeron las investigaciones, ni han expresado disculpas no arrepentimiento por su publicación", apunta el fiscal, que agrega que sus cuentas eran accesibles para cualquier usuario de Twitter.

"La extensión actual de las nuevas tecnologías al servicio de la comunicación, de las que se sirvieron" los imputados, subraya, "intensifica de forma exponencial el daño de afirmaciones o mensajes que, en otro momento, podían haber limitado sus perniciosos efectos a un reducido y seleccionado grupo destinatario", detalla la acusación. A su entender, "la incorporación de mensajes vejatorios como los publicados" por los encausados en redes sociales "con vocación de perpetuidad" comporta "inexorablemente" la pérdida del control sobre su "zigzagueante" difusión y multiplica el impacto "mediante sucesivos y renovados" actos de transmisión.