VICEPRESIDENTE DE JUNTS

Dalmases, un perfil polémico fiel a Borràs

Defiende con uñas y dientes a la presidenta del partido y del Parlament y carga contra ERC en las redes sociales

Su estilo genera incomodidad en sectores de Junts, críticos con el peso que Borràs le ha concedido

Francesc de Dalmases

Francesc de Dalmases / OMAR BARÓN / ACN

Fidel Masreal

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Silencio. Un silencio sonoro. Esto es lo que ha generado en buena parte de su partido, Junts per Catalunya, la última polémica protagonizada por Francesc de Dalmases, vicepresidente de la formación y mano derecha de la presidenta de la formación y del Parlament, Laura Borràs.

Dalmases, nacido en Barcelona en 1970, es periodista y político, y ha estado vinculado previamente a la cooperación al desarrollo, donde ha ocupado cargos destacados. Es educador social de formación, y entró en política a través del Pacte Nacional pel Referèndum. Una persona que compartió esa plataforma con él -y que no comparte ahora latitud política- lo describe como "una persona encantada de haberse conocido, abducida por el 'laurismo' y un fanático y por tanto sectario".

Siempre al lado de Borràs

Pero si Dalmases ha empezado a tomar relevancia política ha sido por su papel como auténtica mano derecha, asesor y escudero fiel de Laura Borràs, desde que esta iniciara una meteórica carrera que la ha situado como presidenta de Junts y del Parlament.

Según algunos de sus compañeros de partido y sin embargo rivales, Dalmases ha ejercido una influencia negativa, radical, en la dirigente y candidata electoral, a favor de una manera de hacer política impulsiva y de trinchera. Dalmases no se prodiga en medios de comunicación, pero en Twitter es directo y categórico a la hora de castigar especialmente a un rival, ERC, y a todas las versiones del independentismo que no encajan con la hoja de ruta de Borràs, basada en levantar de nuevo la bandera de la Declaración Unilateral de Independencia. "Usa un tono amenazador y chulesco", afirma una dirigente de JxCat, que se refiere a comentarios en el seno del propio grupo parlamentario.

El entorno de fieles de Borràs sí ha roto el silencio para defender a Dalmases y enmarcar su última polémica -una bronca a una periodista de TV-3 por la entrevista que el programa ´Faqs' realizó a Borràs- en un ataque a Junts por parte de los rivales políticos. Una manera parecida a la que el propio Dalmases y la presidenta del Parlament afrontan otros casos como el inminente juicio a la dirigente soberanista por delitos vinculados con la corrupción: asegurar que todo responde al ejercicio represivo del Estado contra el independentismo.

Sin pelos en la lengua

El incidente con la periodista de TV-3 (grave, según el Govern y diversos colectivos periodísticos) lo protagoniza Dalmases, que forma parte de la comisión parlamentaria de control a los medios públicos en el Parlament. Fuentes cercanas al parlamentario aseguran que el caso se ha exagerado. En todo caso sí existen precedentes de comentarios críticos del propio dirigente de Junts sobre determinadas actuaciones periodísticas en TV-3.

En cualquier caso, Dalmases es uno de los cuatro vicepresidentes de Junts, votado por 1419 militantes, y cuenta pues con un aval interno y sobre todo con el apoyo incondicional de Borràs. Su actitud sigue siendo combativa. Este lunes, en la ejecutiva del partido, mostraba de nuevo su enojo por determinadas votaciones del reciente congreso del partido.

Su entorno advierte: no va a dar su brazo a torcer en la defensa de Borràs y de la estrategia de independentismo combativo, el que predica de nuevo el conflicto y poner en práctica la declaración de independencia frente la vía negociadora de ERC. El perfil de Dalmases es pues la personalización de una tendencia interna en Junts que convive, no sin periódicos roces, con las caras más pragmáticas de la formación. Las que guardan silencio ante la polémica del vicepresidente de la formación.

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