Investigación

El rey Juan Carlos completa sus documentos para apelar en Londres a la espera de la respuesta de Corinna

Una vez que los abogados de su examante respondan a sus argumentos sobre la inmunidad, se nombrará un juez o jueza para decidir si se le da o no luz verde para recurrir en la Corte de Apelaciones del Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales

Juan Carlos I, el pasado 20 de mayo, saluda desde el barco en Sanxenxo (Pontevedra). / EUROPA PRESS

Juan Carlos I, el pasado 20 de mayo, saluda desde el barco en Sanxenxo (Pontevedra). / EUROPA PRESS / EUROPA PRESS

Ernesto Ekaizer

Ernesto Ekaizer

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los abogados de Juan Carlos I han presentado el pasado viernes 10 de junio la solicitud formal ('application') en la Corte de Apelaciones del Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales ('High Court') para recurrir la sentencia del juez Matthew Nicklin del 24 de marzo que denegó la inmunidad del rey emérito y dictaminó que debe responder a la demanda civil por presuntos actos de acoso, persecución ilegal y difamación de su examante Corinna zu Sayn-Wittgenstein sin esa protección soberana. Hasta ahora, habían pedido a los abogados de su examante ciertas piezas y documentos con el argumento de que existían nuevas pruebas. Esa petición ya ha tenido respuesta por lo que los abogados de Juan Carlos I han completado el material de la apelación ('appeal bundle') siendo el mismo remitido esta semana a la demandante. El material consiste en documentos o evidencias junto con el llamado 'skeleton', el escrito con los puntos de derecho y razonamientos que justificarían la autorización para apelar la sentencia del juez Nicklin.

Una vez que los abogados de Corinna presenten su contestación y sus pruebas, dirigidos a pedir que no se autorice la apelación porque se busca con ella retrasar la investigación del juez Nicklin, se formará el rollo completo de la causa. La Corte de Apelaciones designará al juez o jueza para que estudie los argumentos. Si él o ella concluye que existen puntos de derecho reales – es decir, si no se trata simplemente de ganar tiempo- se pasará a la fase de 'case management', señalándose a audiencia para que se expongan los argumentos por los llamados 'barristers' (letrados encargados de presentar el caso ante el tribunal) de ambas partes.

Εl juez Nicklin pidió al abogado Daniel Bethtlehem el 29 de marzo pasado, al rechazar su solicitud ante el propio juez para que reconsiderara en súplica o reposición su sentencia contraria a la inmunidad del 24 de marzo, que actuaran con celeridad y que le mantuvieran informado sobre la marcha del procedimiento de apelación. El juez advirtió que la causa no debe sufrir dilaciones indebidas, habida cuenta de que todavía quedan dos cuestiones previas pendientes, aparte de la inmunidad.

Comunicación defectuosa

Una se refiere a lo que Juan Carlos I considera una defectuosa comunicación de la demanda civil, que se le envió directamente por Whatsapp al teléfono móvil del emérito ante la imposibilidad de conseguir la recepción en el Palacio de la Zarzuela. Según sus abogados, antes de comunicar la demanda los letrados de Corinna debían dirigirse al Foreign Office (Ministerio de Asuntos Exteriores inglés) para solicitar autorización, circunstancia, que, según aseguran, habría impedido la tramitación.

La otra cuestión previa es la petición de Juan Carlos I de una declinatoria de jurisdicción, a saber, con el argumento de que el acoso denunciado por Corinna no encaja en la ley inglesa, los abogados señalan que sería mejor remitir el caso a España para que se siguiera el procedimiento en los tribunales civiles españoles.

Los letrados de Corinna han rechazado ambas cuestiones previas y todos los indicios que han salido de las audiencias respecto a la disposición del juez Nicklin no son muy prometedores para Juan Carlos I.

Costas costosas

De modo que cuando resulte solventado el asunto de la inmunidad soberana o de Estado invocada por la defensa del rey emérito, caso de volver a perder (la del primer intento ante el juez Nicklin ya le ha supuesto a a Corinna dar a Juan Carlos I un primer bocado de costas de 230.000 libras esterlinas o 271.000 euros que ha debido depositar cautelarmente), el procedimiento podría entrar en el fondo con celeridad, es decir, se pasará a ver los argumentos y las pruebas que esgrimirá Corinna sobre el acoso que imputa a Juan Carlos I y al ex director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), general Félix Sanz Roldán desde 2012 a diciembre de 2020, fecha de presentación de la demanda en Londres.

Tanto el viaje de Juan Carlos I a Sanxenxo y Madrid, el pasado mes de mayo, como la reciente anulación del segundo viaje a Sanxenxo para el Campeonato Mundial de Vela de seis metros, han reforzado la posición de los abogados de Corinna de cara al recurso de apelación. Porque han podido probar aquello que ya se debatió en las audiencias de diciembre pasado en el Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales: que Juan Carlos I puede ser miembro de la familia real pero no forma parte de la Casa de Su Majestad Felipe VI ('household' en inglés), habida cuenta de que, como se reflejó ampliamente en los medios de comunicación en mayo pasado, no pudo pasar noche en el Palacio de la Zarzuela.

Sobre la célebre reunión presuntamente de cuatro horas entre Juan Carlos I y Felipe VI y otras siete más con el resto de familiares en la Zarzuela el lunes 23 de mayo, fuentes consultadas por este diario matizan ahora que en realidad la reunión entre ambos no se extendió más de una hora. “Tras una conversación de una hora, Juan Carlos I mantuvo otras reuniones, entre otras con doña Sofía y se dedicó, sobre todo, a recoger documentos en su antiguo domicilio de la Zarzuela para entregar a sus abogados, material necesario para su defensa”, señaló la fuente.

A la espera de juez o jueza

“Ya es difícil que antes de julio próximo se pueda zanjar el asunto de la inmunidad. Solo cuando los abogados de Corinna, que han recibido estos días el material producido por los abogados de Juan Carlos I, eleven su respuesta, la Corte nombrará juez o jueza para resolver” señaló a EL PERIÓDICO DE CATALUNYA el 'barrister' Josep Gálvez, de Delcanto Chambers, el bufete londinense de abogados.

Hasta ayer, todavía estaba pendiente el procedimiento de apelación de la entrega de la citada respuesta.

Sin 'Lord Justice' o 'Lady Justice' todavía.

Suscríbete para seguir leyendo