Debería haber "pedido perdón"

El Gobierno cambia el paso y carga contra el emérito: "Ha perdido la oportunidad de dar explicaciones"

El Ejecutivo sale de su laconismo y afea a Juan Carlos que no diera la respuesta que "merecen" los ciudadanos y dar cuenta de acciones "nada éticas"

Apunta que podría haber sido "mucho más cuidadoso" en su visita y separa su conducta de la de su hijo, que sí está haciendo "todo lo que tiene que hacer"

El rey Juan Carlos llega a la Zarzuela

Miguel Ángel Rodríguez
Juanma Romero
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El Gobierno se ha cansado de imposturas. De aferrarse al guion de que el rey emérito debía dar "explicaciones" y de que su vuelta era una decisión personal que era competencia exclusivamente suya y de la Zarzuela. Este lunes, tras tres días completos en Sanxenxo (Pontevedra), en la jornada en la que por fin se encontraba con su hijo en un tenso clima, el Ejecutivo dejó ver su decepción. Su enfado por lo que no ha hecho Juan Carlos I en su primer regreso a España después de casi dos años expatriado en Abu Dabi. La Moncloa le recrimina que no haya dado ningún tipo de explicación, que no haya sido "más cuidadoso" con su visita. Un reproche calificado de "realmente suave" por Unidas Podemos, que critica la posición de los socialistas.

La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, habitualmente cauta y lacónica cuando se le pregunta por el emérito, visibilizó el malestar del Gabinete en una entrevista en RNE a primera hora de la mañana. "Ha perdido una oportunidad", disparó sin circunloquios. "Ha perdido la oportunidad que los españoles esperaban de dar explicaciones y pedir perdón. Y sin duda ha perdido la oportunidad que merece la sociedad española y también la democracia. Debía haber aprovechado esta visita para dar cuenta de aquellas acciones que hemos conocido y que no son compatibles con la ejemplaridad y la transparencia que se le exige a una institución como la Casa del Rey", continuó.

Es decir, que el emérito no ha hecho aquello que el Gobierno quería que hiciera. Por propia voluntad. Eso es lo que venía a decir la ministra portavoz. "Afortunadamente" su hijo, Felipe VI, sí está haciendo un esfuerzo en materia de ejemplaridad y transparencia, sostuvo. Ejercicio que se ha "visto reforzado" con el real decreto 297/2022 que el Gobierno aprobó el pasado 26 de abril y que lleva a la normativa jurídica la regulación de la Corona y su fiscalización ante el Tribunal de Cuentas. Es decir, que el Gobierno "ha hecho lo que tenía que hacer".

Rodríguez defiende que el Gobierno sí está haciendo lo que debe hacer y pone en valor el real decreto que aumenta la fiscalización de la Corona

El Ejecutivo defiende que su relación institucional es en este momento con Felipe VI —"una relación institucional enmarcada en el ámbito de la transparencia"—, y reconoce su "labor". Y el actual Rey "sí está haciendo todo lo que tiene que hacer, y quien no lo está haciendo es su padre", defendió, de nuevo sin ambages. El Monarca, a ojos del Gabinete de Pedro Sánchez, está haciendo esfuerzos "inequívocos" por mejorar la imagen de la institución que dirige, por proyectar los "avances" de una monarquía del siglo XXI.

"Daña la imagen del emérito"

Rodríguez apuntó que la visita de estos últimos días desde Abu Dabi "daña sin duda la imagen del rey Juan Carlos", no de la Corona, y por eso cree que "ha perdido la oportunidad" de dar una explicación a los ciudadanos. "Son españoles que creyeron en su trabajo y lo valoraron, que creyeron en él, que se han visto defraudados por los actos nada éticos y ejemplares, por los que debía haber pedido perdón", mantuvo, firme. Sin embargo, él, preguntado anoche por La Sexta si iba a dar explicaciones, respondió con un elocuente "¿explicaciones de qué?" y una sonora y burlona carcajada.

El Ejecutivo culpa al emérito de no haber cumplido lo prometido: “Seguramente eso que escribió es lo que tendría que estar haciendo en estos momentos”

La ministra recordó que en su misiva del pasado 5 de marzo Juan Carlos I aseguraba que quería volver a España "sabiendo que tenía que trabajar para facilitar la tarea del jefe del Estado, del rey Felipe, y que lo iba a hacer en un ámbito de privacidad, para protegerse a sí mismo y estos momentos de su vida". "Pues seguramente eso que escribió es lo que tendría que estar haciendo en estos momentos", añadió. Una muestra más de que el Gobierno acusa al emérito de haber violado el pacto a tres bandas entre él mismo, la Zarzuela y el Gobierno. Y es que, como decía un ministro en la última semana, el exjefe del Estado está "fuera de control" y no rinde cuentas ni ante su hijo.

La incomodidad se extiende a otro punto. Juan Carlos I aterrizó en España en un ‘jet’ privado matriculado en Aruba (Antillas Holandesas) y que le facilitó el jeque Mohamed bin Zayed, presidente de Emiratos Árabes Unidos. Un costoso regalo en especie que no podría haber aceptado según la normativa interna de la Casa Real y que ahora ya está en el BOE, en ese real decreto del 26 de abril. Rodríguez recordó que la actividad de la Corona está sometida a fiscalización y por tanto el emérito "podría haber sido mucho más cuidadoso en esta primera visita a nuestro país". El Gobierno, a la pregunta de si conoce quién ha pagado el vuelo de Abu Dabi a Vigo, alega que es un viaje "privado" y que no tiene conocimiento de los detalles. Estos los debería "ofrecer el emérito". "Solo de él dependen esas explicaciones". Pero no las ha dado.

En la misma línea se pronunció el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska: “Si en su primer viaje a España en estos dos últimos años no ha aprovechado para dar explicaciones y solo para salir al mar y para una barbacoa, entiendo que ha perdido la primera oportunidad importante que tenía de dar explicaciones”, “una oportunidad de oro”, informa Europa Press. Una prueba de que el mensaje del Gobierno estaba decidido y coordinado, y en absoluto fruto de la improvisación. Más tarde, desde la sede del PSOE, el portavoz del partido no quiso ir más allá ni ahondar en las críticas, por mucho que los periodistas le preguntaran una y otra vez. “No hay novedad. Esperamos que dé explicaciones y disculpas”, aseguró Felipe Sicilia. Él fue el primer dirigente de la cúpula que añadió la petición de perdón a la exigencia de explicaciones. Fue el pasado viernes, en Valencia.

Descontento morado

El malestar expresado por la ministra portavoz resultó del todo insuficiente para Podemos. El coportavoz estatal de los morados, Pablo Fernández, reclamó a sus socios en el Gobierno que pasen "de las palabras a los hechos" y que apoyen una comisión de investigación en el Congreso de los Diputados para esclarecer las presuntas irregularidades en la fortuna de Juan Carlos I. La también coportavoz del partido y directora general del Injuve, María Teresa Pérez, tildó de "grave error" el posicionamiento del PSOE.

Pérez señaló que la Monarquía "está siendo el principal impedimento para un avance progresista en un sentido republicano" y aseguró que, más allá de las explicaciones que pudiera dar el rey emérito, es necesario reformular la estructura monárquica. En esencia, defendió que la inviolabilidad que otorga la Constitución al Rey favorece la comisión de delitos. En este sentido, señaló que Felipe VI debería "dejar de ser inviolable" y "ser más honesto y más transparente que su padre".