Oriol Junqueras apunta a un cambio de fase en la negociación con el Estado

El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha abordado este viernes una de las cuestiones espinosas que subyacen en el escándalo del espionaje a decenas de independentistas y que no es otra que cómo afecta al diálogo entre el Estado y la Generalitat, a través de la mesa de negociación. El líder republicano,  en el Fórum Nueva Economía, ha hecho un distingo entre el concepto de negociación, la ‘Negociación’, en mayúscula, como instrumento político y lo que no deja de ser “una concreción de ella”, es decir, la propia mesa de negociación. 

“ERC ha trabajado sin descanso para hallar una concreción a esa negociación. ¿Qué garantías tiene esta concreción? Pues depende de la voluntad y sinceridad de cada una de las dos partes”, apuntó Junqueras, que siguió: “La historia ya nos advirtió de que seguramente sería así, que el Estado arrastraría los pies, que mostraría un interés escaso”.

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Ante ello, ¿qué hacer? “Significa que la Negociación deja de ser útil? No. La Negociación, en mayúsculas, acabará siendo imprescindible y útil. Se concretará en momentos distintos, con representantes distintos”, aseveró.

Dicho en román-paladino. La fase actual, inicial, si se quiere, de la negociación entre el Estado y la Generalitat puede estar tocando a su fin. Pero ello no debe acarrear un cese en el diálogo, sino un cambio de escena. 

Los republicanos tienen claro, desde el inicio de la mesa, que la solución al conflcito no es cosa de una legislatura

Cuando ERC arrancó del PSOE la formación de una mesa de diálogo y negociación con el Estado, y frente a las voces que ya advertían de los pírricos frutos que podría dar, altas fuentes de ERC quisieron poner óptica histórica a este proceso. "En una sola legislatura no se va alcanzar un resultado definitivo".

Dos años sin propuesta

Otra cosa es que los republicanos crean que Sánchez dilata demasiado los tempos y echan en falta que, dos años después de la constitución formal de la mesa, aun no se conozca propuesta alguna del Ejecutivo.

Todo ello, en el marco del ‘Catalangate’. No se movió Junqueras del discurso oficial republicano, en la exigencia de tres pilares para pasar página. La demanda de información y de transparencia, sin la cual, sin saber “el alcance del escándalo no se puede demandar una asunción de responsabilidades.