El laberinto catalán

Los 5 pactos nacionales del 'procés': miembros, objetivos y conclusiones

El Acord per l'Amnistía i l'Autodeterminació se pone a la cola de otros foros creados durante la década de pulso independentista

Pacte Nacional pel Referèndum.

Pacte Nacional pel Referèndum. / Ferran Sendra

Júlia Regué

Júlia Regué

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El 'procés' ha traído consigo una retahíla de pactos, cumbres y órganos que han nacido y desaparecido acorde con los distintos episodios del pulso independentista al Estado. Desde la época de Artur Mas en el Palau de la Generalitat y hasta la presidencia de Pere Aragonès se han sucedido cónclaves institucionales para encarrilar una hoja de ruta, más allá de los organismos fuera de la institución como la Taula per la Democracia, la Asamblea de Cargos Electos, el Consell per la República o el ‘Estado mayor’, reunido en la sombra para preparar la logística del 1-O.

Este es el mosaico empujado desde el Govern antes del nacimiento del Acord Social per l’Amnistia i l’Autodeterminació que impulsa Aragonès para unir al soberanismo en una nueva estrategia conjunta y del que forman parte el exdiputado de la CUP David Fernàndez, la expresidenta del Parlament Carme Forcadell, el 'exconseller' Joaquim Forn, la 'exconsellera' y exdirigente del PSC Marina Geli, la exdiputada de ERC Marina Llansana y la investigadora en ciencias sociales turca Ozgur Günes Öztürk.

Consell Assessor per a la Transició Nacional.

Consell Assessor per a la Transició Nacional. / Ricard Cugat

Consell Assessor per a la Transició Nacional

Tras el pacto de gobierno entre ERC y CiU del 2012 en el que se comprometían a abordar una consulta sobre la independencia, el entonces 'president' Artur Mas conjuró a un grupo de expertos para que analizasen cómo prepararla a nivel “técnico y jurídico”, qué mecanismos requeriría la creación de estructuras de Estado estratégicas que sustentaran una Catalunya independiente y cómo difundir el ‘procés’ entre la comunidad internacional para recabar apoyos.

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Los objetivos

Este foro fue creado el 12 de febrero del 2013 y, desde entonces, el grupo de expertos se conjuró para la elaboración de 18 informes que después editaron como el Llibre Blanc de la Transició Nacional de Catalunya en el que resumían sus argumentos para una independencia que veían “factible”, pero “compleja”. El Govern sacó adelante una ley para la creación de las estructuras de Estado que el Tribunal Constitucional tumbó a petición del Gobierno y posteriormente, con la aplicación del artículo 155 de la Constitución en octubre del 2017, cerró este órgano.

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Las conclusiones

El CATN aseguró que era imposible predecir si una Catalunya independiente permanecería dentro de la Unión Europea, aunque matizó que lo veía probable porque los “criterios políticos” y los “intereses económicos” tendrían más peso que el posible veto español.

El coste de la independencia se situaría entre los 4.500 y los 5.000 millones de euros al mes los primeros meses sin acuerdo con el Gobierno a la espera de la puesta en marcha de una agencia tributaria propia.

Catalunya debería poder mantener el euro incluso quedando fuera de la UE.

La independencia debería llegar por una consulta a la ciudadanía, aunque señala vías para una desconexión unilateral y para la aprobación de una nueva Constitución.

Definieron qué estructuras de Estado deberían crearse: un banco propio, una administración tributaria, un servicio de aduanas, entidades reguladoras, elementos de seguridad y de control del territorio y de las infraestructuras, estructuras para el abastecimiento y una seguridad social, entre otras.

Miembros del Pacte Nacional pel Dret a Decidir.

Miembros del Pacte Nacional pel Dret a Decidir. / Julio Carbó

Pacte Nacional pel Dret a Decidir

Este foro se creó para impulsar la consulta sobre la independencia del 2014 desde un espacio unitario entre instituciones y sociedad civil para promover la convocatoria, sin hurgar en cómo se debería actuar una vez se hubiese votado. Sirvió para acompañar a Mas en su camino hasta el 9-N y pasa sentar las bases de una estrategia unitaria.

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Los objetivos

El Parlament acogió la reunión constitutiva del Pacte Nacional pel Dret a Decidir el 26 de junio del 2013 con la participación de unas 40 entidades y partidos. Fue cosechando adhesiones hasta superar las 1.600 y celebró un total de seis reuniones. En el foro participaron miembros del Govern, de las Diputaciones, alcaldes de varios municipios catalanes, así como representantes de CiU, ERC ICV-EUiA y la CUP, miembros de las entidades soberanistas ANC y Òmnium, además de los sindicatos UGT y CCOO y las patronales Pimec y Cecot. Ni el PSC ni Foment del Treball acabaron participando en los encuentros.

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Las conclusiones

El expresidente del Parlament, Joan Rigol, ejerció como coordinador del foro y redactó un manifiesto, que le encargó Mas, en el que situaban el derecho a decidir como “expresión de la voluntad ampliamente mayoritaria” de Catalunya y se reafirmaba en el concepto de “un solo pueblo”.

En el texto mostraban su “pleno apoyo al proceso democrático que expresa el Parlament” para que el pueblo catalán pueda ejercer su derecho a decidir y reconocían que Catalunya es una nación para urgir a que se estableciera un diálogo con instituciones del Estado “para encontrar las condiciones legales para el ejercicio del derecho a decidir”.

Mas aprovechó la fuerza del órgano para enviar varias cartas al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pidiéndole pactar la celebración de una consulta y la apertura de una negociación que el Ejecutivo central rechazó. Paralelamente, el Parlament sacó adelante una comisión de estudio sobre el derecho a decidir. Meses después, representantes políticos de CiU, ERC, ICV y la CUP anunciaron la pregunta del referéndum. Las elecciones del 27-S, con los partidos en competición, puso fin a sus trabajos.

Carles Viver i Pi-Sunyer.

Carles Viver i Pi-Sunyer. / Ricard Cugat

Comissionat per a la Transició Nacional de Catalunya

El Govern Mas aprobó el 24 de febrero del 2015 este comisionado para la ejecución de medidas para “preparar, planificar, implementar y hacer seguimiento de las estructuras de Estado y la culminación del proceso de transición nacional”. 

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Los objetivos

El líder del CATN, Carles Viver Pi-Sunyer asumió las tareas de estos trabajos dispuesto a preparar la desconexión si los independentistas conseguían una mayoría en las elecciones del 27-S del 2015 que tacharon de “plebiscito”.

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Las conclusiones

El órgano no llegó a emitir conclusiones porque el Tribunal Constitucional suspendió el decreto de creación del comisionado y anuló los planes ejecutivos para la preparación de estructuras de Estado y el plan de infraestructuras estratégicas a petición del Gobierno.

Pacte Nacional pel Referèndum.

Pacte Nacional pel Referèndum. / Ferran Sendra

Pacte Nacional pel Referéndum

Este foro nació el 23 de diciembre bajo la presidencia de Carles Puigdemont como evolución y relevo natural del Pacte Nacional pel Dret a Decidir después de la celebración de la consulta del 9-N y de las elecciones del 27-S del 2015.

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Los objetivos

Para el independentismo supuso “la evolución y consecuencia lógica” del espacio previo para avanzar en la consecución de un referéndum acordado con el Estado y con el apoyo europeo, por lo que echó a andar bajo el propósito de llevar a los catalanes a las urnas para consultar sobre la desonexión.

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Las conclusiones

Los impulsores difundieron un manifiesto que recabó el apoyo de más de 4.000 entidades y 400.000 personas en el que afirmaban que “la voluntad de expresión de los catalanes mediante un referéndum es mayoritaria y transversal” convencidos de que el marco jurídico español “permite la realización” de esta votación de forma acordada con el Estado. Asimismo, instaban al Gobierno y la Generalitat a “superar las dificultades políticas” para lograr un pacto que permita votar con garantías y que este fuera reconocido por la comunidad internacional. El foro finalizó sus trabajos en mayo del 2017, después de que Puigdemont encarrilara la vía unilateral.

Consell Assessor per a l'impuls d'un Fòrum Cívic i Social per al Debat Constituent

Consell Assessor per a l'impuls d'un Fòrum Cívic i Social per al Debat Constituent / Albert Bertran

Consell Assessor per a l’Impuls del Fòrum Cívic i Social pel Debat Constituent

El entonces ‘president’ Quim Torra creó este espacio para que articulara un Fòrum Cívic i Social pel Debat Constituent, un órgano dedicado a configurar un espacio de participación y de cohesión social para debatir por todo el territorio sobre la independencia.

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Los objetivos

El objetivo de este ente creado el 23 de octubre del 2018 era configurar un espacio de participación para debatir sobre el sistema democrático y la posible independencia de Catalunya a partir de temas sectoriales como la lengua, la nacionalidad, los derechos, el modelo económico, la seguridad, las relaciones internacionales o la organización territorial. El fin era elaborar un documento, no una Constitución, para presentarlo en el Parlament y que sirviera como guía para un nuevo Estado independiente.

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Las conclusiones

El consejo asesor se disolvió el 22 de julio del 2019 con la ambición de que se sacara adelante el Fòrum, pasando el relevo a la ciudadanía, pero la batalla partidista y el impacto de la pandemia dejó en el aire sus trabajos. De hecho, el cantautor Lluís Llach, que actuó como presidente del espacio, cargó contra la falta de unidad independentista cuando anunció el cese de sus actividades.

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