Candidatura Pirineus-Barcelona

Catalunya da cobertura legal a la consulta de los Juegos Olímpicos sin pactar dónde se votará

La CUP apoya el decreto porque puede convertirse, a la larga, en una herramienta de presión sobre el Govern

El 'president' de la Generalitat, Pere Aragonès.

El 'president' de la Generalitat, Pere Aragonès. / Jordi Cotrina

Xabi Barrena
Júlia Regué
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El pleno del Parlament aprobó este miércoles el decreto ley del Govern para dar cobertura legal a una consulta sobre la candidatura Pirineus-Barcelona a los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030 que, de seguir las previsiones, se llevará a cabo a principios de verano. El Executiu contó con el plácet de la CUP y la oposición de los ‘comuns’, pese a que los dos socios variables de Pere Aragonès siguen oponiéndose a la celebración de los juegos en Catalunya.

La modificación de la ley de consultas populares de 2014 permitirá que cualquier votación se ciña, a partir de ahora y si se requiere, a una parte del territorio catalán y no a su totalidad. En el caso olímpico facilitará circunscribir la consulta a las comarcas que forman la veguería del Alt Pirineu y Aran. Pero tanto la CUP como los ‘comuns’ exigen que se haga extensible a las comarcas del Berguedà, Solsonès y Ripollès, por cuanto, en los tres casos, se sienten agraviadas porque algunas estaciones que acogerían pruebas olímpicas tienen parte de su superficie en ellas.

Hasta Junts está "trabajando" para que las tres comarcas "puedan votar, siguiendo el mandato de consensuar con el territorio su participación", contraviniendo, así, la posición declarada del Govern.

La decisión de Aragonès

La ‘consellera’ d’Acció Exterior i Govern Obert, Victòria Alsina, defendió los juegos como un escenario “tremendamente positivo” para Catalunya al poder proyectar los Pirineos al mundo y aseguró que la ampliación de la consulta dependerá exclusivamente de la decisión que tome Aragonès “en los próximos días”, algo que ya había deslizado el propio 'president' por la mañana, durante la sesión de control.

Los anticapitalistas consideran que la reforma de la norma es positiva porque no solo atañe a la candidatura olímpica, sino que puede usarse a posteriori para otras propuestas –por ejemplo sobre el macrocomplejo de Hard Rock en el Camp de Tarragona- y convertir así esta legislación en una herramienta de presión. Eso sí, la diputada Dolors Sabater apremió al Govern a resolver ya quién podrá votar y cuál será la pregunta "clara y concisa" porque, de otro modo, "todo esto será un fraude".

Los ‘comuns’, en cambio, fueron sorprendidos por esta lógica cupera, ya que facilita al Govern la futura candidatura a los juegos. Si bien fuentes de la CUP aseguran que hay un compromiso de la Generalitat para ampliar la votación a las tres zonas que ahora no están incluidas, desde Palau lo niegan y ya se ha comunicado esta decisión a los interlocutores de estas comarcas, en algunos casos, incluso, por boca de la propia ‘consellera’ de Presidència, Laura Vilagrà.

De ahí que los morados reclamaran una garantía “por escrito” sobre la ampliación de la consulta. El diputado Marc Parés lanzó un órdago al Govern: “Si ustedes se comprometen aquí y ahora a que las tres comarcas puedan votar, nosotros votaremos a favor”. Así, pidió “responsabilidad democrática” al Executiu y que atendiera a la resolución de hace un mes del Parlament (aprobada también con el voto de ERC) y que abogaba por la participación en el proceso democrático “y en la consulta” de Ripollès, Solsonès y Berguedà. El diputado de los ‘comuns’ incluso insinuó una tercera vía, consciente del “cambio demográfico que supondría la inclusión de estas tres comarcas” y abrió la puerta a estudiar posibles ponderaciones del voto en función de la afectación directa de los juegos.

El PSC, mientras, sigue viendo con incredulidad la consulta. Los socialistas opinan que someter una decisión como esta a una votación perjudica la credibilidad del Govern ante el jurado olímpico. La diputada Marta Moreta recordó la paternidad socialista de la criatura, puesto que fue un Jordi Hereu, acorralado tras su fracasado referéndum de la Diagonal, el que lanzó la idea de la candidatura olímpica, pero para 2022. La socialista llamó a dejar a un lado los “rifirrafes políticos” y apostar de forma “conjunta con Aragón”.

Pésimas relaciones

Las relaciones entre ambas comunidades no pasan por el mejor de los momentos. A finales de enero, el presidente de Aragón, Javier Lambán, suspendió una reunión con Aragonès por las "importantes diferencias" sobre la organización de los juegos. En concreto, la pugna se establece sobre quién lidera la candidatura. La única opción que prevé el Govern es una candidatura catalana que se apoye, en aquellas disciplinas en las que Catalunya no pueda dar respuesta, en Aragón.

La segunda crisis se produjo hace 10 días, cuando el Govern nombró a la exesquiadora olímpica Mònica Bosch como coordinadora de la candidatura Pirineus-Barcelona 2030. Lambán llamó al Comité Olímpico Español a tomar las riendas del proyecto ante el "supremacismo catalán".

Dos días después, en un aparte de la Conferencia de Presidentes de La Palma (Islas Canarias), Aragonès pidió a Lambán que dejara de calentar el ambiente a través de los medios.

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