Polémica

Mónica García afirma que Ayuso "cae en el ridículo" para evitar el reconocimiento a Almudena Grandes

La presidenta madrileña aseguró que la estación de Atocha, que se llamará como la escritora fallecida, ya tenía un nombre femenino, el de la Virgen

Almudena Grandes, que falleció el pasado noviembre víctima de un cáncer.

Almudena Grandes, que falleció el pasado noviembre víctima de un cáncer. / José Luis Roca

Europa Press

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La portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García, ha sostenido este domingo que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP), es capaz de "caer en el ridículo" con tal de negar el reconocimiento a escritoras y grandes referentes. García ha hecho así referencia a las declaraciones de la mandataria madrileña, que aseguró que "la Virgen de Atocha ya era una mujer" cuando le preguntaron su opinión acerca de la intención del Gobierno de coalición de bautizar la céntrica estación madrileña con el nombre de Almudena Grandes. La autora, recientemente fallecida, era una persona muy querida. Y no solo en la capital. Había sido traducida a más de 60 idiomas, tenía una legión de lectores y lectoras de varias generaciones y ejercía como embajadora cultural de la ciudad más allá de sus fronteras. La autora de 'Las tres bodas de Manolita', con su casticismo directo, evocó en sus novelas el Madrid resistente del 'No pasarán'.

Para García, las declaraciones de Ayuso son "claramente desafortunadas" cuando no caen "en el ridículo". A su parecer, la presidenta ha demostrado que no entiende los homenajes a "grandes escritoras" y "referentes". "Con tal de negarles ese derecho, o ese reconocimiento, es capaz de caer en el ridículo", ha declarado.

Desde que falleció, el pasado 27 de noviembre a los 61 años víctima de un cáncer, Grandes ha provocado polémicas políticas. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida (PP), aseguró en una entrevista con 'OKdiario' que la escritora, en su opinión, no merecía ser hija predilecta de la ciudad en la que nació y murió. Finalmente, y tras un intenso rifirrafe, la esposa del poeta Luis García Montero fue nombrada hija predilecta de Madrid a título póstumo, con el voto en contra de Vox.