Reivindicación histórica

El gobierno de Sánchez pacta con ERC anticipar a 60 años la jubilación en los Mossos

El 'conseller' de Interior y los sindicatos policiales celebran la consecución de una medida largamente esperada

Dos gorras en un vehículo de Mossos d'Esquadra.

Dos gorras en un vehículo de Mossos d'Esquadra. / EP

Guillem Sánchez

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Los gobiernos español y catalán han pactado avanzar la edad de jubilación de los agentes de los Mossos d'Esquadra a los 60 años. Con esta medida se atiende una petición largamente esperada por los sindicatos de la policía catalana, que llevaban años denunciando un agravio comparativo en relación con el resto de funcionarios de la Policía Nacional o la Guardia Civil.

El acuerdo, que forma parte del pacto alcanzado entre los partidos del PSOE y Podemos con ERC y Bildu y que permitirá al presidente Pedro Sánchez aprobar los presupuestos generales del Estado, también afectará a la Policía Foral de Navarra. Los Mossos y el cuerpo navarro eran las dos únicas escuadras del Estado con empleados obligados a seguir trabajando hasta los 65 años. Las policías locales habían logrado equipararse con Policía Nacional y Guardia Civil hace pocos años. También lo había conseguido la Ertzaintza. La medida, celebrada por el 'conseller' de Interior, Joan Ignasi Elena, como una "noticia importantísima" que se hace realidad tras "años de justas reivindicaciones", será efectiva a partir de 2022.

"La gente no se podía jubilar hasta los 65 años y la policial es una labor que implica un alto castigo físico. Al resto de cuerpos se les había concedido esta medida porque se consideraba que en muchos casos la tarea era muy complicada de desarrollar al cumplir los 60 años pero los agentes catalanes teníamos que seguir cinco años más. Era el gran reto pendiente que afecta al futuro de muchas personas", valora el portavoz de SAP-Fepol, Toni Castejón. En un comunicado, el Sindicato de Policías de Cataluña (SPC) ha celebrado la culminación de los trabajos que iniciaron en 2004 junto al Erne y el Sindicato de la Policía Foral de Navarra.

Será positivo para los trabajadores pero obligará a la administración catalana a recalcular con esmero los efectivos disponibles porque a partir del próximo año podrán colgar la gorra, de golpe, miembros de cinco promociones distintas. El mes pasado 5 de noviembre, Elena y el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunciaron que la plantilla de los los Mossos, aquejada de una falta de recursos humanos endémica, podrá crecer en un 20%. El techo fijado en 2006 era de 18.267 agentes y ahora es 20.006. Elena anunció entonces que las oposiciones anuales para crecer en los casi 4.000 agentes que faltan para colmar el nuevo límite serán de 800 plazas cada año. Pero eso fue antes de saber que el próximo año el cuerpo se expone a la mayor fuga de funcionarios que ha sufrido en su historia reciente.

En el caso de los Mossos, se tratará en las próximas reuniones entre ministerio y 'conselleria' la forma en que el Estado financiará a la Generalitat el coste de esta jubilación anticipada. Según las fuentes consultadas por EL PERIÓDICO, la administración central debe a la catalana, del dinero asignado para pagar el coste de una policía propia como los Mossos, unos 500 millones de euros. En tiempos del anterior presidente, Mariano Rajoy, esta deuda llegó a ascender a casi mil millones de euros.

La enmienda de Bildu acordada con PSOE y Podemos subraya por su parte que este sistema se aplicará para la Policía Foral una vez la Comisión Coordinadora Estado-Navarra haga efectivo un acuerdo de financiación por parte del Estado sobre la cuantía anual correspondiente a las cotizaciones recargadas que se deban implantar como consecuencia de la pérdida de cotizaciones por el adelanto de la edad de jubilación.