Crisis migratoria

Ceuta no repatriará menores migrantes hasta primavera

El Gobierno ha escolarizado ya a 164 chicos de entre 12 y 16 años en la ciudad, de momento sin contacto con niños españoles

Comienza el retorno a Marruecos de los menores que entraron a Ceuta en mayo

Comienza el retorno a Marruecos de los menores que entraron a Ceuta en mayo / Reduan

Juan José Fernández

Juan José Fernández

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los menores migrantes no acompañados que permanecen en Ceuta tras la oleada del pasado mes de mayo no serán retornados a Marruecos antes de que finalice el próximo invierno, estiman fuentes del gobierno local y de la Delegación del Gobierno en la ciudad autónoma. El proceso de filiación emprendido por el ejecutivo autonómico, que tiene la tutela de los niños marroquís, y el contraste minucioso, paso legal por paso legal, con la Delegación del Gobierno y la fiscalía "llevará al menos seis meses", auguran en la administración autonómica.

La vicepresidencia del Gobierno de Ceuta, de la que depende el área de la tutela de estos menores, ha emprendido un proceso de filiación y traslado a documentación de las circunstancias de cada uno de los menores que tiene alojados. El trabajo supone el intento de elaboración de una lista de cerca de 700 nombres. El número no puede ser definitivo porque ese grupo fluctúa, según salen y abandonan los albergues o retornan a ellos desde los bosques a los que se retiran de noche cerca de medio millar.

Una vez filiados y documentadas sus situaciones, la ciudad dará traslado a la Delegación del Gobierno y a la Fiscalía, y la Delegación del Gobierno, una vez testada la lista, se la hará llegar a las autoridades marroquíes. Estas tendrán que testar también los nombres y ponerse en contacto con las familias, además de estudiar las situaciones, para aceptar o no las repatriaciones.

Las nuevas repatriaciones, según la nueva interpretación rigorista del tratado internacional entre España y Marruecos en el que Ceuta basó las primeras devoluciones, podrían tener lugar meses después de que se pronuncie el juzgado de lo Contencioso de Ceuta sobre la suspensión de nueve traslados, en una instrucción que dio lugar a la paralización de todo el proceso el pasado mes de agosto.

Para ayudar en el procedimiento, Interior ha reforzado la oficina de Extranjería en la ciudad con 12 incorporaciones de funcionarios interinos, anunciadas este jueves por la Delegación del Gobierno. Se trata de “la materialización del compromiso del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con la Ciudad Autónoma de Ceuta, para resolver todas las circunstancias derivadas de la crisis humanitaria de mayo”, explicaron los representantes del Ejecutivo central en una nota.

Por su parte, el gobierno autonómico que preside el popular Juan Jesús Vivas ha contratado a 12 trabajadores sociales y a ocho intérpretes para ayudar en la realización de los informes de los menores.

Escolarizados

La demora en las devoluciones de menores ha supuesto para la ciudad la obligación de cumplir con el mandato legal de escolarizarlos, como tutora que es de los niños. En cinco institutos de la ciudad, 164 menores están siguiendo sus primeras jornadas escolares desde este miércoles. Son los institutos Luis de Camoens, Abyla, Almina, Clara Campoamor y Siete Colinas. Todos los escolarizados tienen entre 12 y 16 años de edad. Menos no, porque no hay niños alojados más pequeños, y más tampoco, porque a partir de los 16 años la escolarización es solo voluntaria.

Los chicos van a clase en turno de tarde, acompañados por técnicos de la firma SAMU, que tiene concedida la gestión de sus albergues, entre los que, descongestionando el polideportivo Santa Amelia, han sido repartidos los escolares. Estos nuevos estudiantes aún no se mezclan con otros alumnos españoles. "No sabemos qué nivel tienen, y por lo tanto no podemos integrarlos directamente en aulas", explica una de las fuentes consultadas. Para evaluar sus conocimientos y asignarles programa educativo específico, han sido contratados una veintena de profesores de refuerzo, además de un grupo de traductores de lengua dariya.

La escolarización de los muchachos está en esa primera fase, y discurre, aseguran en los servicios sociales de la ciudad, a plena complacencia de los profesores, que han hallado en los chicos "una actitud fenomenal y tranquila, y ganas de aprender". Pese a los planes de devolución a Marruecos que tenían otras administraciones, el Ministerio de Educación ha trabajado desde mediados de julio pasado en un programa de respuesta a la necesidad de colegio de los menores solos, para tratar de dar una respuesta individualizada a cada caso.

La primera dificultad estriba en la enseñanza del idioma castellano. De momento, informan las mismas fuentes, no ha sido localizado ningún alumno que por sus conocimientos pueda ser integrado en una clase ordinaria del sistema educativo en la ciudad.