Visita a Navalmoral de la Mata

Sánchez pide a la oposición que aparque la "crispación" y apoye la primera reforma de pensiones

El presidente llama a los grupos a aprobar "entre todos" el primer acuerdo de modificación del sistema en diez años, que supone indexar las prestaciones al IPC

La declaración junto a Vara se desenvuelve en un ambiente tenso, entre protestas a favor del soterramiento de la línea de AVE y aplausos de los asistentes

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, este 26 de agosto de 2021 durante su visita a Navalmoral de la Mata, en Cáceres.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, este 26 de agosto de 2021 durante su visita a Navalmoral de la Mata, en Cáceres. / EFE / CHEMA MOYA

Juanma Romero

Juanma Romero

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La de este jueves fue el segundo Ávila para el presidente del Gobierno. La segunda visita a una provincia española —en este caso, Cáceres, y en concreto la localidad de Navalmoral de la Mata— después del parón veraniego para vender decisiones y gestión. El domingo pasado mostró el "compromiso" del Gobierno con los vecinos de Ávila tras la devastación de los incendios estivales y anunció la declaración de zona catastrófica que el martes aprobó el Consejo de Ministros. El mismo día en que el Ejecutivo respaldó el proyecto de ley de primera reforma de las pensiones, enviado ya a las Cortes para su tramitación. La aprobación de este texto fue lo que llevó a Pedro Sánchez a viajar hasta Extremadura, hasta un hogar de mayores de la localidad cacereña.

Tras esa visita, el jefe del Ejecutivo hizo una breve declaración sin preguntas, acompañado por el presidente de la Junta, el socialista Guillermo Fernández Vara. El mensaje que Sánchez se reservó fue claro: un llamamiento a la oposición para que abandone la "crispación" y la "confrontación" y apoye este primer bloque de reformas del sistema de pensiones, que garantiza la revalorización de las prestaciones según el IPC. Y es que no está nada claro que pueda salir adelante, ni siquiera con los socios de investidura.

La comparecencia, al aire libre en el parque municipal Casto Lozano, se desenvolvió en un ambiente de cierta tensión, ya que se escuchaban abucheos de un grupo de personas de la plataforma 'No al muro' —que pide el soterramiento de la línea de AVE a su paso por Navalmoral— y de otro puñado de personas que gritaban e insultaban a Sánchez, estas más próximas a Vox, según la lectura del círculo del presidente y de Vara. "¡Fuera, fuera!", se podía oír durante la declaración. Chillidos que eran contrarrestados por los aplausos de los que estaban presentes en la plaza.

El presidente recalca que una "recuperación justa" implica que "se traslade a los salarios, al empleo de nuestros jóvenes, y a unas jubilaciones dignas"

Sánchez inscribió la "importante" reforma de las pensiones en el marco de la "recuperación" económica que sigue a la pandemia, recuperación que "no podrá ser total si no es justa". Y la misma vacunación, que ya se acerca al 70% de la población española, "significa recuperación económica", como se está apreciando en los datos de PIB del último trimestre, de afiliación a la Seguridad Social y de reactivación de trabajadores en ertes. "Una recuperación justa significa, para el Gobierno, que se traslade a los salarios, al empleo de nuestros jóvenes, y a unas jubilaciones dignas para nuestros mayores", aseguró. Apuntaba implícitamente a un alza del salario mínimo, a la que la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, ya se abrió el mes pasado y que podría acometerse a partir de septiembre.

En la construcción de esas "jubilaciones dignas" camina el proyecto de ley aprobado el martes por el Consejo de Ministros, subrayó, texto que contiene tres elementos, a su juicio, claves. Uno, la reconstrucción del consenso entre el Gobierno, los partidos y los agentes sociales, porque el último acuerdo transversal en esta materia data de 2011, ya que la aprobación del factor de sostenibilidad en 2013 por el Ejecutivo de Mariano Rajoy rompió el Pacto de Toledo. Dos, la garantía de la revalorización de las pensiones conforme al IPC, que ya no dependerá, recordó, del "Gobierno de turno", ya que será una obligación legal. Y tres, se "clarifican las fuentes de financiación de la Seguridad Social", para dar "tranquilidad" sobre todo a los "pensionistas del mañana".

"Cuenta con nosotros"

En ese punto, Sánchez extendió su petición a "todos" los grupos parlamentarios. "Dejemos la confrontación y la crispación y aprobemos entre todos en el Parlamento este importante acuerdo de pensiones". El presidente esgrimió que si todos los partidos están de acuerdo en "reforzar el diálogo social", en revalorizar las prestaciones según el IPC y en garantizar el sostenimiento "presente y futuro" del sistema, y "desde luego" el Gobierno y sindicatos y empresarios lo están, "tienen que estar todos los grupos políticos de acuerdo". "Unámonos todos votando a favor de este importante acuerdo para las pensiones de hoy y del mañana", insistió el líder socialista. La apelación no es baladí, porque ya en julio, cuando el Consejo de Ministros aprobó el anteproyecto, grupos como ERC, Bildu o el PNV, además del PP, expresaron sus recelos, cuando no su rechazo, al texto del Ejecutivo. Así que el proyecto llega ahora al Congreso sin tener los apoyos garantizados. Bruselas demanda la reforma de las pensiones, incluida en el plan de recuperación, y el Gobierno se ha comprometido a culminarla —y aún queda por negociar la parte más complicada— antes de finales de año.

El líder socialista remarca que en un año la línea ferroviaria de alta velocidad demandada por Extremadura ya será una realidad en 2022

Sánchez hizo un aparte con un mensaje más en clave territorial, como hiciera en Ávila. Aseguró, al final de su declaración, que en 2022, por estas fechas, ya "será una realidad" la línea de alta velocidad demandada por Extremadura. Para entonces estará listo el tramo Oropesa-Badajoz (que acortará el viaje una hora y media, aproximadamente), aunque aún faltaría la conexión con Madrid, pendiente de licitación. Vara agradeció el compromiso del Ejecutivo con el AVE, porque desde que llegó a la Moncloa, "se puso manos a la obra" para "cumplir" esa "deuda" con Extremadura. "Cuenta también con nosotros —le dijo el mandatario regional al líder socialista— para todo lo que podamos hacer en el beneficio de esta casa común que se llama España. Lo que esté en nuestras manos lo tendrás".

El presidente, por su parte, agradeció las palabras de Vara y de la alcaldesa de Navalmoral, la también socialista Raquel Medina, y subrayó el esfuerzo de Extremadura para superar ya el 70% de cobertura vacunal completa. Sánchez recordó que en el peor momento de la pandemia hubo 30.000 extremeños en erte, y ahora son menos de 3.000.

La visita de Sánchez a Navalmoral forma parte de la estrategia de la Moncloa de hacer que el líder pise "más territorio", esté más presente en las comunidades y ofrezca "soluciones concretas" a problemas no solo coyunturales, sino endémicos. Propósito que se irá acentuando en las próximas semanas, una vez culmine la evacuación de refugiados en Afganistán. Crisis que, por cierto, el presidente no mencionó durante su breve alocución en Cáceres.