Entresijos de una nueva desunión soberanista

Junts cuestiona los dos años de margen que dio a la mesa de diálogo en su pacto con ERC

ERC acusa a sus socios de "gesticular" y dar golpes de timón, y defiende la negociación bilateral con "ambición"

La vicepresidenta i portaveu de JxCat, Elsa Artadi, durant una roda de premsa a la seu del partit. 26 de juliol del 2021.

La vicepresidenta i portaveu de JxCat, Elsa Artadi, durant una roda de premsa a la seu del partit. 26 de juliol del 2021.

Fidel Masreal
Júlia Regué
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No han pasado ni cien días del renovado pacto entre republicanos y posconvergentes y, pese a haberse conjurado para evitar los constantes choques de los años pasados y haber creado una decena de comisiones bilaterales de seguimiento del acuerdo, Junts ya pone en cuestión una de las esencias del pacto: los dos años de margen a la negociación con el Estado. Lo afirmó en rueda de prensa la portavoz del partido sin que esta amenaza fuera objeto de acuerdo previo en la ejecutiva de Junts, según fuentes de la formación. ERC ha evitado entrar al trapo y fuentes de la dirección atribuyen este aviso a la "gesticulación" de sus socios porque "no pueden aguantar" que la mesa de diálogo sea el fruto de un pacto entre el PSOE y ERC.

La portavoz de ERC, Marta Vilalta, hablo de "menosprecio" a la vía del diálogo. Y, minutos después, su homóloga en Junts, Elsa Artadi habló de un Gobierno que "endurece" posiciones y cuestionó abiertamente los términos de lo pactado con los republicanos hace poco más de dos meses: "Nos planteamos si realmente habrá que esperar o no dos años para ver qué recorrido tiene esta supuesta mesa de diálogo. Con esta actitud, igual no habrá ni que esperar estos dos años", espetó. Artadi subrayó que su formación trabaja "desde el primer día" en una vía alternativa, de la que no dio detalles.

La invectiva de Artadi sorprendió a miembros de la dirección posconvergente, que aseguraron que esta amenaza no se debatió ni acordó previamente en la ejecutiva del partido. Es más, estas fuentes consideran grave que se ponga en crisis el pacto con ERC cuando acaba de arrancar la legislatura.

La respuesta de ERC

La encargada de responder a las ya persistentes críticas de los posconvergentes al diálogo con el Estado fue Vilalta que se dirigió a "aquellos que se obcecan en menospreciarla", sin mencionarlos, defendiendo que la delegación catalana acudirá al encuentro "con escepticismo, pero con mucha ambición" en defensa de la amnistía y autodeterminación. Vilalta destacó que tanto la comisión bilateral como la mesa de diálogo "son dos grandes espacios absolutamente necesarios y complementarios". "Escépticos, sí, como muchas veces, también ahora para afrontar las negociaciones, pero nunca haremos la estrategia de brazos caídos, iremos a batallarlo todo y en todos los espacios. Justamente lo que queremos es hacer oír nuestra voz a todas partes", aseveró, y defendió que, en paralelo, el Govern intentará conseguir "mejoras" en cuestiones del "día a día" a través de la Comisión Bilateral Estado- Generalitat, que se reunirá el próximo 2 de agosto en Madrid.

Sobre las prisas de la CUP y ERC para preparar una alternativa, Vilalta insistió en que "es evidente que el primer día no tendremos la solución, habrá que conseguir los objetivos paso a paso, así como construir las confianzas necesarias para resolver el conflicto".

El aviso de Puigdemont

Todavía faltan dos meses para que teóricamente se vuelvan a reunir después de que la segunda convocatoria de la mesa de diálogo se viera accidentada por la pandemia del coronavirus, pero el 'expresident' Carles Puigdemont criticó de nuevo este fin de semana la mesa de negociación, después de la presidenta del Parlament Laura Borràs y el 'exconseller' Jordi Turull apuntaran también en esta dirección: "Los procesos políticos no se pueden hacer sin la gente, no se pueden decidir desde un despacho ni en una mesa llamada de diálogo [...] No se puede hacer país sin contar con la gente, ninguno de estos procesos determinantes para el futuro de un país se puede hacer a espaldas de la gente", espetó desde El Soler (Francia). Los anticapitalistas llevan semanas exigiendo que se convoque cuanto antes l'Acord Nacional per l'Autodeterminació i l'Amnistía para "preparar un nuevo embate" de forma paralela a la mesa de diálogo en la que no depositan ninguna confianza.