INVESTIGACIÓN JUDICIAL

Vendrell guardaba una hoja de ruta para utilizar la mesa de diálogo contra el Estado

El documento, sin fecha, apuesta por negociar o convocar un referéndum y no descarta otra DUI

Xavier Vendrell  en la puerta de la Ciutat de la Justícia de Barcelona.

Xavier Vendrell en la puerta de la Ciutat de la Justícia de Barcelona. / RICARD CUGAT

J. G. Albalat

J. G. Albalat

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La Guardia Civil halló en el teléfono móvil del 'exconseller' de ERC Xavier Vendrell, detenido en el marco de la operación Voloh, una hoja de ruta hacia la independencia que contemplaba "utilizar" la mesa de dialogo entre el Ejecutivo central y la Generalitat para “abrir los ojos a los catalanes” y aprovecharla para "enfrentar Gobierno y Estado". No se especifica fecha de ese documento, pero las fuentes consultadas por este diario lo sitúan después de la sentencia del ‘procés’, pues hace mención a "reducir las penas" por la declaración unilateral de independencia (DUI) en los tribunales europeos.

Este plan, cuya autoría también se desconoce y al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, figura en un informe realizado por la Guardia Civil a partir de los dispositivos hallados a Vendrell durante su detención el pasado octubre durante la operación Voloh, dirigida por el juez de Barcelona Joaquín Aguirre. Los agentes han encontrado una foto de una reunión por videoconferencia del exdirigente republicano, a quien consideran miembro del 'estado mayor' del 'expresident' Carles Puigdemont, con el altos cargos de ERC, como Oriol Junqueras, el exmandatario catalán residente en Bélgica y otros dirigentes soberanistas.

Mediación internacional

El documento en que se plasma la "hoja de ruta" divide el plan en tres fases: “Prepararnos”, “Votar” y “Culminar”. En la primera se propugna “ensanchar la base social ERC y JxCat” y “utilizar la mesa de negociación para abrir los ojos de más catalanes”, así como "aprovechar la situación económica" para convencer de la bonanza de la independencia y “confrontar al Estado en la calle defendiendo el Parlament y las instituciones”. El propósito, según ese esquema, es “aprovechar la mesa de diálogo para enfrentar Gobierno y Estado”, denunciar la vulneración de derechos humanos, "acorralar al Estado judicialmente", debilitarlo "con la contracción económica" y "ejercer la desobediencia civil”.

Otro de los pasos previstos en este plan es conseguir la complicidad internacional mediante una campaña que difunda que la solución para Europa es una Catalunya independiente. Para ello, además, se pretende "aprovechar el sentimiento antieuropeo de la derecha española causado por los tribunales europeos" y apelar a una mediación internacional.

50% de los votos y referéndum

En el apartado de “Votar” se proyecta superar el 50% de los votos “de forma estructural” en un “ciclo electoral”, que no precisa, así como convocar unos comicios catalanes “con carácter plebiscitario”. En el caso de conseguir la mayoría de los votos, la idea es “presentar un ultimátum al Estado y a la comunidad internacional para negociar una solución política definitiva en el conflicto”.

Por último, la fase “Culminar” describe dos escenarios. El primero de ellos es si la "comunidad internacional interviene" y plantea "negociar un referéndum" pactado o impuesto. Si el primer requisito no se logra, la idea es convocar directamente una consulta unilateral, "no descartando en ningún momento", señala el documento, una nueva DUI "si las condiciones lo permiten". El último escalón sería "proclamar la república" catalana.