Illa pide a Aragonès que levante el veto al PSC

Salvador Illa se pasó toda la campaña pidiendo que Catalunya "pasara página" del 'procés', pero este jueves fue él quien pasó página. El candidato del PSC asumió por primera vez en público que, pese a ganar las elecciones de febrero, no será presidente de la Generalitat, e hizo un discurso de jefe de la oposición. Será el papel que ocupará lo que dure la legislatura, y quiere interpretarlo como hizo en su intervención parlamentaria: con un talante abierto, incluso amable, muy alejado del estilo de sus antecesores de Ciudadanos.

Ese estilo constructivo no fue obstáculo para que Illa hurgase en la división entre ERC y JxCat, que volverán a compartir Govern a partir de la semana que viene. El candidato socialista hizo un repaso de las dificultades con las que Pere Aragonès se ha encontrado durante las negociaciones. "Hemos visto diferencias aireadas sin pudor. Hemos visto muchos plazos y ultimátums, sin ningún otro efecto de perjudicar a quien los proclamaba con rotundidad pero con debilidad", le ha reprochado.

Illa también ha dejado claro que el PSC quiere dar esta vez la batalla ideológica cuando ha atacado a fondo las promesas de Aragonès sobre la secesión de Catalunya. "Habla de culminar la independencia. Eso no pasará, usted lo sabe, lo sabe todo el mundo. Dibuja un horizonte para una parte del país, no para todos. Plantea hitos como la amnistía y la autodeterminación, que no se producirán", le ha dicho.

En el mismo sentido, le ha pedido al futuro 'president' que levante el cordón sanitario que, durante la campaña y junto al resto de candidatos independentistas, levantó en torno al PSC: "Usted expone una mezcla de diálogo y confrontación. Es una contradicción. ¿Cómo se dialoga vetando al primer partido de la Cámara? El mío es el primer partido de Catalunya". Aragonès le contestó que primero habría que "levantar el veto" a hablar "sobre la autodeterminación y la Monarquía" en el Parlament.

Nacionalista, no; "tarradellista"

En la contrarréplica al candidato de ERC, Illa le ha pedido que no lo califique de "nacionalista español", porque no lo es. "Ni nacionalista español, ni nacionalista catalán. No me gusta ponerme etiquetas, pero si me quiere poner una y hacerme feliz, póngame la de tarradellista, y eso nos une a su partido y al mío", añadió. Aragonès, que sonreía desde su escaño, renunció a contestarle.