El Parlament amplía el aforo del hemiciclo para los próximos plenos

Después de tres sesiones en el auditorio, los diputados del Parlament volverán al hemiciclo siguiendo el cumplimiento estricto de las medidas anticovid. La adaptación de la sala que acogió la constitución de la Cámara catalana en su 13ª legislatura y las dos sesiones del debate de investidura fallida del aspirante republicano Pere Aragonès costaron 152.000 euros, un gasto logístico que los grupos parlamentarios consideran demasiado elevado. De ahí que en la reunión extraordinaria de la Mesa del Parlament, celebrada este jueves, se haya acordado que los próximos plenos se celebren en el hemiciclo.

Desde el estallido de la pandemia, el aforo se limitó a 21 representantes, pero la actual situación epidemiológica permite elevar esta cifra a entre 40 y 68 personas. Para las votaciones se seguirá permitiendo el sistema telemático o la delegación a un representante del grupo parlamentario si se cumplen los requisitos. Habrá dos excepciones: el pleno de investidura -que deberá celebrarse como muy tarde el 26 de mayo- al que podrán asistir los 135 elegidos, que deberán pronunciarse a viva voz sobre si avalan o no al presidenciable, y la sesión plenaria en la que se debe votar en urna la designación de la diputada de Junts, Aurora Madaula, como secretaria de la Mesa tras la renuncia de Jaume Alonso-Cuevillas.

El lunes se reunirá la Junta de Portavoces para fijar el orden del día y la fecha del pleno, que tendrá lugar la semana que viene, según fuentes parlamentarias. Varias voces apuntan que en esa jornada se podría incluir la sesión de control al Govern, solicitada por el PSC, Cs y PPC, para fiscalizar la acción gubernamental del Executiu en funciones, y también el relevo de Cuevillas.

Medidas sanitarias

Para que los diputados puedan respetar las medidas sanitarias decretadas, se dejará un asiento vacío entre los diputados, por lo que será necesario habilitar la totalidad de las localidades de la sala, incluida la tribuna y los palcos.

También se regulará el uso de las mascarillas que deberán ser del tipo FFP2 y habrá un punto de control de temperatura antes de acceder al edificio. Entre los miembros de la Mesa se instalarán unas mamparas, ya que en ese espacio es complicado mantener la distancia interpersonal requerida.