En Vallecas

Los altercados en el acto de Vox caldean la contienda electoral del 4-M

Vox, PP y Cs cargan contra Iglesias por no condenar la violencia y acusar a Abascal de ir a "provocar"

Grande-Marlaska recibe las críticas del partido ultra, del Ayuntamiento de Madrid y de JUPOL por el operativo policial

Disturbios Vallecas mitin VOX       David Castro

Disturbios Vallecas mitin VOX David Castro / David Castro

Miguel Ángel Rodríguez

Miguel Ángel Rodríguez

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A falta de diez días para que arranque la campaña electoral en Madrid la tensión política ya está por las nubes. Y, todo apunta, a que esto no ha hecho más que empezar. Los altercados en el acto de Vox celebrado en el madrileño barrio de Vallecas y las palabras de Pablo Iglesias denunciando la estrategia de Santiago Abascal de "provocar violencia" en los barrios del sur de la capital empiezan a caldear la competición por los comicios del 4-M. La derecha, en masa, criticó al secretario general de Podemos por no condenar los altercados y, además, señalaron al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, como principal responsable. 

Como un reflejo de las elecciones vascas y catalanas, Vox eligió un barrio obrero para uno de sus primeros acto. El mitin, que a nadie se le escapó que era de alto riesgo, terminó con cargas policiales contra los vecinos que protestaban por su celebración en la conocida como 'plaza Roja' de Vallecas. Iglesias, al igual que el líder de Más País, Íñigo Errejón, reprocharon a la formación ultra que hubiera elegido este enclave, en pleno cinturón rojo de Madrid y cuna política del exvicepresidente, para alentar al odio. "Los ultraderechistas de Vox organizaron una concentración con el fin, absolutamente deliberado y evidente, de provocar altercados en el barrio", se reafirmó el candidato morado en un vídeo que publicó en Twitter este jueves.

"Vamos a pisar cada metro de Madrid", le respondió Abascal desde un acto celebrado en el madrileño distrito de Vicálvaro –también en la zona sur de la capital-. El líder de Vox, que el pasado miércoles se encaró con los vecinos de Vallecas provocando las cargas policiales, acusó a Iglesias de "criminal" y "mentiroso patológico". Su candidata a la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, llegó a pedir la "ilegalización" de Unidas Podemos si el exvicepresidente no condenaba de manera firme la violencia. 

Los reproches a Iglesias también llegaron desde el PP y Cs. Pablo Casado, reiteró su condena a los "ataques inaceptables" que sufrieron los simpatizantes ultras y arremetió contra el secretario general de los morados por "justificar y alentar" lo ocurrido. Por su parte, el cabeza de lista naranja, Edmundo Bal, amentó que el exvicepresidente "disculpe la violencia [...] solo porque es contra una opinión política distinta".

La polémica policial

Iglesias no fue el único que recibió los golpes de la derecha. Ya durante el acto del pasado miércoles, mientras la policía cargaba contra los vecinos de Vallecas, Abascal acusó en más de una decena de ocasiones al ministro del Interior de no haber blindado la plaza contra los manifestantes. "[Fernando Grande] Marlaska es directamente responsable de todas las agresiones que se produjeron. Montó un dispositivo policial gigantesco que no se usó como es debido", subrayó este jueves en Antena3. Monasterio, a la par que pedía ilegalizar a los morados, exigió que todos aquellos que consideren los hechos ocurrido en Vallecas "una vergüenza" pidan la dimisión del ministro.

Las críticas a Grande-Marlaska llegaron también desde el consistorio municipal. La portavoz del Gobierno del Ayuntamiento de Madrid, Inmaculada Sanz, aseguró que el responsable de Interior "no garantizó" que el acto se desarrollara con un "mínimo de normalidad". Fuera del ámbito político, JUPOL, el sindicato mayoritario en la Policía Nacional, se sumó a la denuncia de la "falta de previsión y dotación de medios" para afrontar una movilización como la que tuvo lugar. 

El ministerio del Interior, en declaraciones a Europa Press, defendió que "se diseñó un dispositivo policial acorde a unas circunstancias complejas con el fin de garantizar los derechos de todos". Además, puso el foco en la actitud de Abascal al encararse con los vecinos de Vallecas: "Determinadas actitudes, sobre todo aquellas que se produjeron al no seguir las indicaciones y pautas de los agentes que velaban por la seguridad, ponen en riesgo es el trabajo y la integridad física de los propios agentes de la Policía Nacional".