Negociaciones estancadas

Sánchez y Casado vuelven a cruzarse reproches por el bloqueo del CGPJ

El PP rechaza que el PSOE proponga a Prada y Rosell, a los que considera afines a Podemos

El presidente del Gobierno pide al jefe de la oposición que "recapacite" y deje los vetos

Reunión del CGPJ en Madrid

Reunión del CGPJ en Madrid / EFE / JUANJO MARTÍN

Pilar Santos
Miguel Ángel Rodríguez
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Tanto el Gobierno como el PP habían enviado señales estos últimos días de que la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y de otros órganos constitucionales estaba a punto de completarse. Superados los dos años de bloqueo por parte del partido de Pablo Casado, la Moncloa y el jefe de la oposición iban a firmar su primer gran pacto, después del prólogo que supuso este jueves el acuerdo sobre la nueva cúpula de RTVE. Sin embargo, la madrugada del viernes, tras otro largo día de reuniones y llamadas de teléfono, ambas partes hicieron saber, en un mensaje común pactado, que hay "escollos" que impiden alcanzar el acuerdo por ahora. Pedro Sánchez y Casado se cruzaron reproches mutuamente. El primero le acusó de poner "vetos"; el segundo, de "politizar" la justicia.

"Cuando se busca un acuerdo, las partes tienen la certeza de que van a tener que renunciar a algo, sin vetos, buscando con coraje el acuerdo a través del diálogo", sentenció el presidente del Gobierno en una rueda de prensa en la Moncloa. "El PP había optado por el camino de la moderación, del acuerdo y del diálogo. Hoy lo que hemos visto es todo lo contrario, un PP que unos días dice unas cosas y otros hace la contraria", insistió. Sánchez pidió a los populares que "recapaciten" y demuestren que el acuerdo sobre RTVE "no ha sido flor de un día".

El choque

Casado convocó por la mañana a sus colaboradores del comité de dirección para explicarles el estado de la cuestión. Les dijo que el principal problema es que el PSOE mantiene su propuesta de designar como vocales al juez José Ricardo de Prada, que trabajó en el 'caso Gürtel', y a Victoria Rosell, actual delegada contra la Violencia de Género. El PP veta a ambos por considerarlos afines a Podemos. "Cuando Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se aclaren en sus peleas internas, que nos llamen", les soltó Casado a los suyos. En Génova consideran que el vicepresidente morado no ceja en su empeño con esos dos nombres, porque está haciendo pagar al jefe del Ejecutivo sus últimos encontronazos por las políticas de igualdad y de vivienda.

"El PP había optado por el camino de la moderación, del acuerdo y del diálogo. Hoy lo que hemos visto es todo lo contrario"

Pedro Sánchez

— Presidente del Gobierno

Según los conservadores, Prada no ha sido elegido por sus compañeros dentro del turno judicial ni ha recogido avales para ello. Respecto a Rosell, Casado cree que eso sería permitir "puertas giratorias entre política y justicia". "Ningún político puede ser vocal del CGPJ como ha ocurrido hasta ahora", considera el líder del PP.

Sánchez no quiso hacer referencia directa a Prada y Rosell, aunque de manera implícita sí que confirmó que forman parte del problema cuando los periodistas se refirieron en varias ocasiones a ellos dos y el jefe del Ejecutivo, en una de las respuestas, comentó que "los nombres que se ponen encima de la mesa no dejan de ser personas con una valía profesional".

Podemos responsabiliza del nuevo distanciamiento al PP por considerar que busca su propia "supervivencia" ante los diferentes casos de corrupción que le afectan. Según el presidente del grupo parlamentario, Jaume Asens, la verdadera razón del bloqueo no es Podemos, "se llama 'caso Lezo', 'caso Púnica', 'caso Kitchen' o [Luis] Bárcenas".

El equipo negociador

Las conversaciones han estado encabezadas por el secretario general de la Presidencia del Gobierno, Félix Bolaños, y el secretario general del PP, Teodoro García Egea. El representante de los populares aseguró al inicio de esta semana que el Gobierno había atendido su petición y que el partido de Pablo Iglesias había quedado fuera de la negociación, pero tanto desde la parte socialista del Ejecutivo como desde el propio PSOE se aclaró que quien negociaba en nombre del Gobierno lo hacía en representación de los dos socios que lo conforman, socialistas y morados. También desde Podemos se admitió que estaban muy tranquilos, ya que confiaban en la lealtad de los socialistas en este asunto.

"Las peleas de coalición entre Sánchez e Iglesias han hecho descarrilar el acuerdo de renovación del CGPJ"

— Javier Maroto. Portavoz del PP en el Senado

El PP quiso reactivar la negociación la semana pasada, una vez superadas las elecciones al Parlament. Casado temía darle una baza a Vox, que se manifiesta contrario a que los dos grandes partidos "se repartan los jueces". Pese a aplazar ese acuerdo con el Gobierno, los ultras han vapuleado a los populares en Catalunya: 11 escaños a 3.

A la vez que el CGPJ también se está negociando la renovación del Tribunal Constitucional, el Defensor del Pueblo, el Tribunal de Cuentas y la Agencia Española de Protección de Datos.