Negociación de un nuevo Govern

Pere Aragonès: "Esta será la legislatura de preparación del nuevo referéndum"

El presidenciable de ERC afirma que se producirá una consulta "acepte o no el Gobierno" y añade que "la paciencia de los catalanes no es infinita"

Junqueras retorna a un conclave de partido y traza un hilo de continuidad entre el futuro gabinete republicano y los de Macià y Companys

El cap de llista d ERC a les eleccions al Parlament  Pere Aragones  durant un acte a Barcelona  Imatge del 10 de febrer de 2021  (Horitzontal) ERC - Marc Puig ACN

El cap de llista d ERC a les eleccions al Parlament Pere Aragones durant un acte a Barcelona Imatge del 10 de febrer de 2021 (Horitzontal) ERC - Marc Puig ACN / ACN / Marc Puig

Xabi Barrena

Xabi Barrena

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ERC empieza a maniobrar levemente su trayectoria para animar a que las otras fuerzas independentistas hagan lo propio y poder llegar, así, a un acuerdo de Govern. El presidenciable republicano, Pere Aragonès, aseveró el viernes que esta legislatura que está por iniciarse será “la de la preparación “ de un nuevo “referéndum”. Esta nueva consulta de autodeterminación se producirá tanto si el Gobierno del Estado “lo acepta como si no”, porque “la paciencia de los catalanes no es eterna”, en referencia a los tiempos que debe manejar la mesa de diálogo entre ejecutivos. 

Sin que Aragonès y ERC precisarán cuándo se producirá este referéndum (¿al final de la legislatura? , ¿en la siguiente?) el que lo planteara en un horizonte temporal a corto-medio plazo tiende ya coincidir con los designios de CUP y Junts. Los primeros abogan por el 2025, al final de la legislatura. Y los segundos no han puesto fecha, pero si han hecho llegar que hay que poner un límite a la negociación con el Estado. Hasta ahora, los republicanos repetían que su fuerza nunca ha renunciado a la unilateralidad, pero sin bosquejar, siquiera ni un escenario lejano.

Las palabras del coordinador republicano fueron medidamente ambiguas. “Ha dicho lo que ha dicho”, señaló una fuente a la que se le pidió cierta concreción, al menos de legislatura, donde se procedería a ese eventual referéndum. Otra asevero: “Sin precipitarnos, pero habrá que volver a votar”.

Aragonès también reclamó a los ‘comuns’ y, sobre todo a la CUP, por ser la que tiene más visos de pactar un Executiu, que el “14-F dictó un mandato directo y exigente” a las fuerzas soberanistas “de que nos entendamos” ante el que no cabe “esconderse, sino mostrar visión amplia”. Y sentenció: “No podemos frenar la fuerza del 1-O escondiéndonos”.

Reaparición de Junqueras

Las palabras de Aragonès se produjeron en el consejo nacional del partido republicano en el que se celebró la victoria ‘ex aequo’ de ERC (con el PSC en escaños, aunque se quedará 48.000 por detrás de los socialistas) que le permitirá optar a liderar el Govern. En este cónclave participó, por primera vez desde septiembre del 2017, Oriol Junqueras que trazó un hilo de continuidad entre la nonata “Generalitat republicana” del siglo XXI con la de los años 30 del siglo pasado. En medio, citó la dictadura y la transición, para recordar que ellos se quedaron fuera del pacto constitucional, “los únicos”. Ni una mención a los 40 años de autonomismo, comandados en un 80% por el espacio convergente. 

Y eso que, también el viernes, ERC y Junts celebraron la esperada primera reunión para formar gobierno. Que como suele ser habitual en los debuts fue de guante blanco. “Tono cordial”, coincidieron ambas partes. Poco se abordó más allá de felicitarse todos por la mayoría independentista lograda y ese 51% de voto común.

Eso sí, en su comunicado, los posconvergentes se “reafirmaban” en su voluntad de llegar a acuerdos “en los espacios institucionales donde el independentismo tiene representación”. Como por ejemplo el Congreso, donde el puigdemontismo parece interesado en tejer una unidad de acción con los republicanos.