Negociaciones tras el 14-F

JxCat se plantea exigir a ERC que acote la fase de diálogo con el Estado

El partido de Puigdemont perfila su estrategia con un equipo negociador formado por los más fieles al 'expresident'

Junts hace palanca con la CUP para exigir a los republicanos un plan b unilateral si falla la negociación

Carles Puigdemont en un acto de campaña de Junts, en Vic.

Carles Puigdemont en un acto de campaña de Junts, en Vic. / Pere Francesch

Fidel Masreal

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Junts per Catalunya sigue velando armas. Entre las hipótesis de trabajo de su estrategia negociadora con ERC, cuando comiencen los contactos formales con los republicanos, sobresale una idea expresada por destacadísimos dirigentes del partido del 'expresident' Carles Puigdemont: poner a Esquerra como condición para negociar con el Estado que este diálogo se acote en el tiempo. Un tiempo tras el cual, en ausencia de resultados, el Govern debería emprender el camino de la unilateralidad.

Junts sostiene que no tiene inconveniente alguno en explorar las opciones de una salida dialogada al conflicto con el Estado. "No hemos dejado nunca de estar abiertos al diálogo", afirman. De este modo, es posible hallar un punto en común con la estrategia de ERC, que prioriza esta vía: retomar la mesa de diálogo con el Gobierno -Junts debería decidir si mantiene como condición que se incluya la figura del mediador y se reconozca el derecho de autodeterminación de Catalunya- iniciada en la anterior legislatura y que solo celebró una reunión en la Moncloa.

Choque a medio plazo

Pero Junts ha desplegado también en su programa una agenda a favor de la secesión unilateral, con varias medidas como volver a dar validez a las declaraciones de soberanía que ha llevado a cabo el Parlament en los últimos años, la posibilidad de medidas de "resistencia y desobediencia institucional" y preparar la "transición" hacia la república catalana. El objetivo de todo ello sería, cuando la ciudadanía, las instituciones y el Consell per la República estén preparadas, "proceder a activar la DUI". Y además, "movilizar al país para su defensa pacífica y democrática".

Pues bien, el plan pasaría por acotar a un período de tiempo esta primera etapa de diálogo en la que Junts actuaría lealmente, pero exigir a ERC que -en virtud de que los republicanos tampoco descartan la unilateralidad y que la CUP la reclama- se vaya preparando la vía no acordada.

El equipo encargado de pulir esta estrategia y negociar con ERC estará compuesto por figuras fieles a Puigdemont: el secretario general de Junts, Jordi Sànchez; los vicepresidentes Josep Rius y Elsa Artadi; la portavoz en el Congreso, Míriam Nogueras, y el diputado en el Parlament Francesc de Dalmases.

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