Aplazamiento electoral

El PSC carga con dureza contra el decreto de prórroga electoral y el Govern le pide que no lo recurra

Los socialistas alertan de que se trata de una "tomadura de pelo" y teme que se cambien las reglas del juego

El 'conseller' de Exteriores apela a la "responsabilidad" para que no sea un tribunal el que fije el calendario electoral

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, en una rueda de prensa en el Parlament.

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, en una rueda de prensa en el Parlament. / QUIQUE GARCIA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los especialistas en leyes del PSC se llevan las manos a la cabeza. A juzgar por su criterio, el decreto del Govern por el que se suspenden las elecciones del 14 de febrero y se anuncia nueva fecha para el 30 de mayo es una "chapuza" porque deja la nueva fecha al albur de los datos epidemiológicos y genera una gran inseguridad jurídica. A su juicio, se deja en manos del Govern la concreción o no de la nueva fecha.

Además, el PSC teme que en el decreto de medidas complementarias, el que concretará qué puede mantenerse y qué puede cambiar respecto al 14-F, se va a abrir la veda para que se presenten nuevas candidaturas y se forjen nuevas coaliciones. "Sería una tomadura de pelo", sostienen los socialistas, que exigen no modificar nada de lo ya iniciado para el 14-F. En cualquier caso, el PSC no sólo valorará la cuestión legal sino las repercusiones políticas a la hora de decidir si recurre contra la nueva fecha electoral.

Mientras, el Govern sigue de cerca los movimientos del PSC. El 'conseller' de Exteriores, Bernat Solé, aprovechó una entrevista en Rac 1 para pedir explícitamente a los socialistas catalanes que no presenten batalla legal por "responsabilidad" y para que no sea un tribunal el que decida si se puede votar o no.