Sánchez impulsa los indultos: "Hay que superar tiempos aciagos"

El presidente anuncia que trabaja con Felipe VI en una próxima “renovación” de la Corona

Defiende la “unidad” con Podemos y garantiza que la coalición no se va a romper

MADRID  29 12 2020  POLITICA  Comparecencia del presidente del Gobierno  Pedro Sanchez  en el Palacio de la Moncloa  FOTO  JOSE LUIS ROCA

MADRID 29 12 2020 POLITICA Comparecencia del presidente del Gobierno Pedro Sanchez en el Palacio de la Moncloa FOTO JOSE LUIS ROCA / JOSÉ LUIS ROCA

Juan Ruiz Sierra

Juan Ruiz Sierra

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El Gobierno continúa preparando el terreno para abordar los sensibles indultos a los dirigentes independentistas presos por el 1-O. Cada vez es más claro a la hora de abrir la puerta a esta medida. Tras pesos pesados del Ejecutivo como José Luis Ábalos y Carmen Calvo, este martes fue el propio Pedro Sánchez quien movió ficha. Durante la rueda de prensa para hacer balance del año que ahora acaba, el más inusual de la historia reciente debido a la pandemia del coronavirus, el presidente abogó por “superar tiempos aciagos”, en relación a las condenas por el referéndum celebrado en Catalunya en 2017. 

El líder socialista no anticipó nada. “Me pronunciaré cuando [las propuestas de indulto] lleguen a la mesa del Consejo de Ministros”, dijo. De momento, la Fiscalía emitió la semana pasada su informe, preceptivo pero no vinculante, en el que rechaza de forma categórica conceder esta medida de gracia. Todavía falta el escrito del Tribunal Supremo, que salvo gran sorpresa será también negativo. Pero en la Moncloa insisten en que la decisión, al final, será solo suya, y no tiene por qué seguir el parecer del ministerio público y los magistrados.

“Este es un Gobierno que desde el principio no ha escondido sus intenciones: apuesta por el reencuentro, la reconciliación y la convivencia en Catalunya y de Catalunya con España. Es muy importante superar tiempos aciagos que nos sonrojan a todos. Cuando hablamos de Catalunya, nadie está libre de culpa. Todos hemos cometido errores. Tenemos que aprender de ellos, mirar hacia delante, y ser capaces de construir un espacio en el que nos podamos reencontrar”, continuó Sánchez, en la declaración más clara que se le conoce sobre la posibilidad de conceder indultos, que cada vez parece más cercana. Aun así, fuentes del Gobierno descartan, en principio, que la decisión se apruebe antes de las elecciones catalanas del próximo 14 de febrero. 

La reforma del delito de sedición, que incluirá una rebaja de las penas, de la que se podrían beneficiar los dirigentes independentistas, tampoco tiene un horizonte muy definido. El Gobierno se comprometió a impulsarla este año, cosa que ha incumplido. Sánchez se limitó a señalar que la reforma del Código Penal entrará en vigor “a lo largo de 2021”, sin concretar más. 

La “valentía” del Rey

En una larga comparecencia tras el último Consejo de Ministros del año, en la que lució su grado de cumplimiento de los compromisos adquiridos y subrayó la “unidad” de la coalición que forman el PSOE y Podemos, Sánchez también se detuvo en la Monarquía, sometida a convulsiones durante los últimos tiempos, debido a los escándalos del rey emérito, Juan Carlos I. Dentro de su habitual discreción sobre los asuntos que afectan a la Corona, el presidente fue algo más nítido de lo habitual, al anunciar que trabaja con Felipe VI en la “renovación” de la institución, confirmando que habrá cambios en la Jefatura del Estado, como había sugerido el día anterior la vicepresidenta primera

Sánchez elogió el discurso que el Rey pronunció en Nochebuena, muy criticado por Podemos y los aliados del PSOE en el Congreso, en el que pasó de puntillas por los presuntos trapos sucios de su padre, a los que apenas dedicó una frase genérica en la que aseguraba que los “principios morales y éticos” obligan “a todos sin excepciones”. Según el presidente, “fue una comparecencia valiente, en la que Felipe VI marcó claramente el rumbo hacia el que dirigir la Corona: una monarquía parlamentaria constitucional adecuada a la España del siglo XXI, bajo los pilares de la renovación y de la ejemplaridad”.

Aquí Sánchez fue más allá. “El Rey contará con todo nuestro apoyo y nuestro aplauso para seguir en esa tarea de renovación”, señaló. “En esa renovación”, insistió el líder socialista, dando a entender que habrá novedades a corto plazo, “va a continuar la Corona, y el Gobierno va a ayudar”. Pero no precisó. “Paso a paso. Ya irán conociendo en qué se materializará esa hoja de ruta”, dijo, sin aclarar si lo que está en preparación es una ley de la Corona (algo que descartan algunas fuentes del Gobierno), modificar la inviolabilidad del Monarca o retirar el título de rey emérito a Juan Carlos I. En cualquier caso, el líder del PP, Pablo Casado, ofreció su apoyo para esta tarea, “siempre y cuando sea para reforzar” a Felipe VI. 

Legislatura “larga y fructífera”

Durante algo más de una hora, Sánchez presentó un informe que recoge el grado de cumplimiento de los compromisos adquiridos por el Gobierno, tanto en sus acuerdos con los distintos grupos parlamentarios como en las declaraciones llevadas a cabo por sus miembros. Según los cálculos de la Moncloa, es muy amplio. “Desde la investidura, el Gobierno ha asumido un total de 1.238 compromisos. A día de hoy, hemos cumplido ya el 23,4%. En el próximo semestre, estaremos ya en el 32,6%. Es decir, un tercio del total en un tercio del mandato”, dijo el presidente. 

Porque el líder socialista, a pesar de los continuos y crecientes choques con Pablo Iglesias (sobre la Monarquía, las pensiones, el salario mínimo o la renovación del Poder Judicial), aseguró que esta legislatura será “larga y fructífera”. La coalición del PSOE y Podemos no se va romper. El Ejecutivo, concluyó, sale de este año tan complejo “más fuerte, más unido, y tiene claro cuál es su hoja de ruta para los próximos tres años: la modernización”.

El presidente mantiene la mano tendida a Casado para renovar el CGPJ

Pedro Sánchez cree que la oposición de derechas sigue un ritmo opuesto al de estos tiempos marcados por la lucha contra el virus. El Ejecutivo promueve la “unidad”, y también los ciudadanos, los agentes sociales, las administraciones y la UE, argumentó. Pero no el PP y Vox, con su discurso durísimo contra la coalición del PSOE y Podemos. “La oposición describe al Gobierno como una suerte de hombre del saco, que nunca llega, por cierto”, dijo.  

“España puede optar por el camino del miedo o por el camino de la esperanza. Lo que tenemos por delante es todo menos fácil. Habrá quien lo aproveche para infundir miedo. Van a inventar conspiraciones fantasmales, lunáticas. Van a trazar un panorama apocalíptico. Pero hay otro camino, el de la esperanza y la confianza. Yo confío en España, en nuestras capacidades para sobreponernos a la adversidad”, explicó el presidente, que continúa apostando por un pacto con el líder del PP, Pablo Casado, para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), cuyo mandato expiró hace dos años. 

En este sentido, Sánchez descartó, de momento, activar su polémica propuesta de rebajar las mayorías parlamentarias necesarias para elegir a los miembros del organismo de gobierno de los jueces, en aras de un acuerdo con los conservadores, que rechazan una reforma por la que dejarían de ser indispensables para la renovación. El Gobierno confía en que habrá entendimiento con Casado después de los comicios catalanes del 14 de febrero, cuando se haya disipado el miedo del líder conservador a que Vox aproveche en las urnas este hipotético pacto con los socialistas. “Creo que hemos demostrado una buena voluntad de llegar a acuerdo con el PP y de respetar las actuales mayorías”, señaló Sánchez.