Las 'dos posconvergencias' chocan en el Congreso por los Presupuestos

La portavoz de Junts per Catalunya en el Congreso, Laura Borràs, abandona el hemiciclo, el pasado 25 de junio

La portavoz de Junts per Catalunya en el Congreso, Laura Borràs, abandona el hemiciclo, el pasado 25 de junio / periodico

Xabi Barrena

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Las dos almas herederas de CDC, la puigdemontista y la demócrata (del PDECat) se han alineado este miércoles en bandos distintos en el debate de las enmiendas a la totalidad del proyecto de Presupuestos Generales del estado del bipartito PSOE-Podemos. Las posiciones de salida eran conocidas, pero la utilización de argumentos contrapuestos, y alguna pulla del PDECat al Govern, explicitaron en Madrid el cisma posconvergente

La portavoz de Junts per Catalunya en el Congreso, Laura Borrás, defendió este miércoles la enmienda a la totalidad de su medio grupo afeando a Pedro Sánchez que se valga de la situación pandémica en España para exigir “adhesiones” inquebrantables. Para Borràs, no hay irresponsabilidad alguna en poner trabas a estas cuentas, si no que, acaso, incurriría en dejadez si permitiera su aprobación  “gratis”. "Claro que presentamos una enmienda a la totalidad, ¿o acaso no lo hizo el PSC en las cuentas de la Generalitat, hace unos meses?", afirmó.

En nombre del otro medio grupo, Ferran Bel, para fijar su posición al no haber presentado enmienda, recordó que el debate se ceñía a si se retornaba el proyecto al Gobierno o no. Es decir, si se mantienen vigentes o no las cuentas actuales, que datan del Ejecutivo del PP. “Son unas cuentas pre-Gobierno y pre-pandemia, a los que el PDECat, en su día, ya se opuso”, señaló el diputado demócrata".

Reivindicaciones habituales

El discurso de Borràs y Bel también contaron con un tronco común, partes extensibles a las expresadas, a lo largo de las décadas, por los portavoces de los grupos nacionalistas e independentistas catalanes en debates de este tipo. La insuficiencia habitual de inversiones para Catalunya y la reclamación de fondos para sufragar la ley estatal de dependencia, de la que la Generalitat soporta un 87% del gasto cuando, en principio, este debía de ser a medias con el Estado. "Estamos apara acabar con el expolio, no para avalarlo", dijo Borràs en la réplica.

Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, y como vía para marcar perfil distinguidor con los puigdemontistas, Bel también atizó al Govern, del que formaba parte su parte hasta la ‘purga’ de setiembre por parte de Quim Torra. A cuenta de los autónomos, a quien el Estado ha subido la cuota mensual, Bel aseveró que el desaguisado del martes con los 20 millones de ayuda a los cotizantes catalanes “es un despropósito solo atribuible al Ejecutivo catalán”.  

Borràs, asimismo, introdujo también el factor de desestabilización que introduce el conflicto entre Estado y Generalitat. A eso, la ministra de Economía, María Jesús Montero, respondió que cada "debate tiene su lugar y solo se explica que Junts per Catlunya prefiera los presupuestos del PP bajo la premisa de que les interesa la polarización".