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El estrés que genera en la gente el aluvión de medidas anticovid (y en los funcionarios del BOE)

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Miriam Ruiz Castro

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A las diez de la mañana, Ángel María Marinero envía a la Agencia Estatal del Boletín Oficial del Estado (BOE) un listado con los cambios en la ingente cantidad de normas que rigen la vida en pandemia. Normativa que cambia de un día para otro y que se esfuerzan en compilar en un código electrónico para hacerla más accesible. "Ya no llevo la cuenta porque me parece masoquista", señala a EL PERIÓDICO. Marinero elaboraba el código urbanístico de las 17 comunidades autónomas y, ante esta situación de emergencia, le pidieron que se ocupara del código electrónico del covid-19.

"Para hacerse a la idea del cambio de escala, normalmente hay de media una modificación a la semana en alguna de las normas urbanísticas de las 17 comunidades autónomas. En este cambian una docena de normas al día", dice. Con casi dos millones de descargas, la normativa covid-19 tiene el récord del BOE, un trabajo invisible que ahora acapara todas las miradas. "Esa cantidad de descargas las suma el Código Penal en 10 años", dice el director general del BOE, Manuel Tuero.  

Desde marzo se han publicado hasta 26 boletines extraordinarios; es decir, dos boletines por día. "Hemos visto amanecer en el trabajo", indica Tuero. "Son normas muy diferentes, se elaboran muy rápido, son breves, y muchas están hechas para durar 15 días. Desde el punto de vista normativo es muy novedoso", señala Marinero.

En la tarde del pasado jueves, 'BOJA' (el boletín de la Junta de Andalucía) era uno de los temas más comentados en Twitter. El presidente de la Junta, Juanma Moreno, había anunciado el día anterior el cierre perimetral de la región y de 449 municipios para la medianoche y apenas unas horas antes el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía no se había publicado. Ciudadanos pero también ayuntamientos andaluces denunciaron la inseguridad jurídica: "Tenemos multitud de solicitudes de desplazamientos y sin normativa en la que ampararse para emitirlos", se quejaba Consuelo Doncel, secretaria-interventora en Lora del Río, Sevilla. "Yo ando igual. Acaban de anunciar medidas que entran en vigor mañana y en el DOGC nada. Inseguridad jurídica total", le respondía Alba Estévez, del Ayuntamiento de Santa Margarida i els Monjos, en Barcelona. El Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (DOGC) que recogía nuevas restricciones se publicó pasada la medianoche, con medidas que contemplan cierres municipales para cinco horas después.

A más precisión territorial, más normas

La ingente normativa que ha derivado del covid ha sido excepcional. "Muchas son de ámbito municipal, y ligeramente diferentes de las de otro municipio, porque se hacen en función de los datos epidemiológicos. Ese grado de detalle al principio de la pandemia no lo había; si se me permite la expresión, se legislaba a lo bruto", indica Marinero. Es la principal consecuencia del paso de un mando único al gobierno de las comunidades autónomas: mayor capacidad de afinar las medidas necesarias y circunscribirlas solo a su territorio, pero también más disparidad y variedad de normas. Los cierres perimetrales del fin de semana son un buen ejemplo de que ya ni siquiera sirve con conocer la normativa de la propia comunidad. De ahí la importante labor de la Agencia del BOE: "Hemos conseguido crear un punto único de acceso al derecho, muy útil en este momento", insiste Tuero. Comenzaron a hacerlo al principio de la pandemia, antes de que las comunidades tomaran el mando, y el cambio les ha cogido "en forma".

Desde marzo se han aprobado tres decretos de estado de alarma con siete prórrogas y 25 reales decretos-ley, todos ellos relacionados directa o indirectamente con la crisis sanitaria. Se incluyen leyes con medidas ajenas al covid-19 pero cuya tramitación se ha acelerado por la pandemia, como el ingreso mínimo vital o la ley de trabajo a distancia. Además de otros más de 200 textos entre órdenes, acuerdos y resoluciones. Son normativas "complejas", en las que se incluyen medidas "con vocación de permanencia en legislación para una situación excepcional, lo que hace que todo tenga una complejidad bastante alta", dice Tuero. A nivel autonómico, el volumen de normas de cada comunidad es bastante similar. En Catalunya suman ya 165 normas; una treintena de ellas, decretos ley. Y subiendo. 

Casi siete de cada 10 ciudadanos quieren que gestionen Gobierno central y comunidades autónomas en colaboración, según el CIS. Pero es la difícil "cogobernanza" la que está estirando las costuras de un estado autonómico que nunca antes se había enfrentado a una situación similar. La disparidad de medidas autonómicas, que no siempre surgen de los acuerdos del Consejo Interterritorial de Sanidad, no contribuye a aclararse ante la maraña normativa. "El ciudadano cuando lee el BOE no se entera", sentencia Tuero.

Un mar de dudas

La Guardia Civil y la Policía Nacional constatan que vuelven a aumentar las consultas de ciudadanos para aclarar dudas. "A lo que llega a través del BOE le damos aplicación directa, nosotros tenemos que estar al día de todo lo que sale, sobre todo de movilidad", indican desde la Benemérita. Aunque en algunos momentos la situación ha sido algo caótica y de improvisación, con poco margen para montar controles o dar indicaciones a todos los guardias a pie de calle, la estructura funciona porque cada agente conoce las medidas del área en que opera. "Hay que estar mucho más atento y más al día de todo porque son decisiones que se toman para ya, pero en general la ciudadanía está poniendo facilidades", señalan desde la Guardia Civil. Normalmente, los agentes no ponen sanciones durante las primeras horas de vigencia de nuevas normas y se limitan a informar a los ciudadanos y hacer pedagogía.

A la Policía le llegan el mayor número de consultas a través de las redes sociales. La avalancha de mensajes de la primera ola se redujo con el periodo estival, pero cada vez que hay alguna novedad importante vuelven a multiplicarse las preguntas. "Nosotros lo que no podemos hacer es interpretar la norma. Cuando nos ponen una casuística demasiado concreta, lo que hacemos es remitirles a los boletines para que cada persona lo interprete", indican desde la policía. "Entre nosotros también tenemos dudas, pero el Gobierno a través de los medios de comunicación nos ayuda a que esa información llegue más digerida". 

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