EL LABERINTO CATALÁN

JxCat presiona a ERC para pactar el plan hasta las urnas

Elsa Artadi

Elsa Artadi / ACN / BERNAT VILARÓ

Fidel Masreal

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El 'expresident' Carles Puigdemont y sus fieles redoblan la presión sobre Esquerra Republicana para alcanzar un pacto sobre qué hacer si, como es probable, el Tribunal Supremo, confirma la inhabilitación del 'president' Quim Torra. La formación del 'expresident' quiere que se acuerde el calendario electoral, sí, sin que Torra convoque antes los comicios. Pero también reclaman que el pacto incluya una eventual candidatura conjunta, así como los tempos del nuevo período y la estrategia independentista.

En el mismo sentido, el propio Puigdemont, en Catalunya Ràdio, dio por hecho que se deberá acatar la legalidad si Torra es inhabilitado, y propone una respuesta "de país" a esta decisión judicial, que vaya más allá del independentismo. Puigdemont es partidario de manifestar un rechazo global y a partir de aquí acordar los siguientes pasos, sin desvelar si será o no candidato por Junts.

Poco después, la portavoz de ERC, Marta Vilalta, advertía que el debate que debe asumir el independentismo no es el de si "elecciones sí o no", porque "las va a haber de todas formas", sino que la decisión es "si se desea un tiempo de provisionalidad de 54 o de 124 días", informa Xabi Barrena.

Torrent, en el punto de mira

La intención de los seguidores del 'expresident' es que el presidente del Parlament, Roger Torrent, acuerde con ellos la activación del reloj electoral una vez se produzca la inhabilitación de Torra. Eso significa que Torrent podría adoptar una decisión ejecutiva sin tener que convocar un pleno del Parlament para buscar un eventual candidato alternativo. Candidato improbable dado que Torra no quiere que se presente un nombre alternativo dentro del independentismo, y la oposición tampoco dispone de una figura alternativa con votos suficientes.

La decisión no está tomada, pero Torrent tiene una alta capacidad y margen de maniobra, como bien sabe Junts, que al respecto ha dejado de presionar explícitamente porque no existen alternativas y el calendario está muy definido. Así pues, se trataría de aplicar lo que un informe de los letrados del Parlament en el 2018 ya apuntaba en relación al 'tamayazo' en la Comunidad de Madrid, y es el "acto jurídico equivalente" por el cual ya se activa la convocatoria electoral 54 días después de tal decisión, sin esperar más a que se presente un candidato o candidata a 'president'. Pero todo ello de forma pactada y acordada con ERC, que es el partido que ostentará las funciones de presidencia de la Generalitat -con algunas facultades limitadas- en la figura del hoy vicepresidente Pere Aragonès.

Torra no quiere escenificaciones

En todo este contexto actúan los cálculos electorales de unos y otros. Las negociaciones siguen su curso. Y de momento se sabe que Torra no quiere forzar la legalidad si es inhabilitado. Es decir, que no tiene intención de escenificar actos de desobediencia. La apuesta de JxCat pasa por enmarcar la inhabilitación en la "represión" del Estado, cargar contra la vía negociadora y así presionar a Esquerra.