El Govern certifica el portazo a la mesa de diálogo

El Govern ha corroborado este martes las condiciones que pone el presidente de la Generalitat, Quim Torra, para retomar la mesa de diálogo con el Ejecutivo que preside Pedro Sánchez. La parte catalana no se sentará a hablar sobre nada si en el orden del día no se incluye, previamente, una negociación sobre la “amnistía de los presos y los exiliados” y sobre el derecho de autodeterminación.

La portavoz de la Generalitat, Meritxell Budó, ha explicado que, en todo caso, debería ser el Gobierno quien pidiera y pusiera fecha a ese encuentro, y “después hay que ver si existe voluntad de abordar la resolución del conflicto”. El presidente del Gobierno había dicho poco antes que está dispuesto a volver a reunir la mesa, que es uno de los principales logros que ERC exhibe para avalar su apuesta por el diálogo, antes de conocer esas condiciones.

"No tiene sentido"

En nombre del Govern, sin embargo, Budó ha abrazado la tesis de que la mesa solo “debe servir” para “la resolución del conflicto, que todos sabemos que pasa por la amnistía y por poder ejercer el derecho de autodeterminación”. “Si no se abordan, no tiene sentido esa mesa”, ha añadido.

Además, la portavoz del Govern ha pedido que en el “trabajo previo” que se lleve a cabo se fijen esas prioridades, difícilmente asumibles por Sánchez, en el orden del día. “Y por supuesto todas las garantías de que lo que se hable en esa mesa se llevará a cabo. Una ministra de Sánchez [la titular de Defensa, Margarita Robles] definió la mesa como juegos florales. No queremos juegos florales, queremos una mesa para resolver el conflicto político”, ha dicho.