ENTREVISTA AL EXPRESIDENTE DE LA GENERALITAT

Artur Mas: "Para un independentista puro, la sentencia del Estatut fue una bendición"

10 años de la sentencia del Estatut. Entrevista con Artur Mas

10 años de la sentencia del Estatut. Entrevista con Artur Mas /

Fidel Masreal

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Cuando el Parlament aprobó la propuesta de Estatut, solo el líder del PPC, Josep Piqué, avisó de que el texto sería rebajado en Madrid. ¿No eran conscientes ustedes de que llegarían las rebajas?

Yo era plenamente consciente de que aquello no se aprobaría en Madrid. No engañé a nadie porque así lo manifesté. La prueba es que nos pusimos a negociar después y la cosa fue a la baja. La pregunta es: ¿valió la pena el pacto que se hizo en Madrid rebajando el Estatut para que se pudiera aprobar? Sigo pensando que sí.

Pese a que ERC lo consideró una rebaja excesiva...

Se ha de recordar el incumplimento de la palabra del presidente Zapatero, que había dicho: 'lo que salga del Parlament yo lo asumiré'. Si negociamos a la baja fue por el incumplimiento de Zapatero. El día después de aprobarse el Estatut en el Parlament, el PSC anuncia que presentará enmiendas en el Congreso. Y si me pongo en la negociación, es porque Zapatero deja de considerar interlocutor suyo al 'president' Maragall y me pide que asuma el peso de la negociación, con conocimiento del PSC. 'Yo me tengo que entender contigo', me dijo. Y llegamos a un acuerdo, que provocó la salida de ERC del Govern, que también estaba negociando a la baja.

En ese pacto en la Moncloa, ¿en ningún momento se incluyó hacer todo lo posible para que el Constitucional no tocara el Estatut?

No, ni se habló.

Visto lo visto, ¿no es un poco ingenuo?

Quizá sí que sea ingenuo, no lo niego. Que fuera poco previsor, tampoco. Pero que en el contexto de ese momento nadie pensaba que esto acabaría con un revolcón del Constitucional, de eso doy fe. Ninguno de nosotros dos lo pensó. La dificultad del pacto era tan grande, que todo estaba concentrado en ese pacto. Una vez alcanzado y aprobado en referéndum el Estatut, ya habíamos hecho el trabajo.

Una vez se inicia el trámite del Constitucional, ¿el Gobierno hizo lo suficiente para conseguir una sentencia favorable?

Creo que no.

"Sigo pensando que valió la pena el pacto que se hizo en Madrid rebajando el Estatut para que se pudiera aprobar"

¿Cree que al presidente Zapatero o al PSOE les iba bien que la sentencia cercenara el Estatut?

Yo creo que no les iba bien, pero de la misma manera digo que no hicieron gran cosa para intentar salvar ese Estatut cuatro años después, no hicieron lo que deberían haber hecho.

Hay quien afirma que había una sentencia más dura sobre la mesa...

Seguramente. Lo que es malo siempre es susceptible de empeorar.

¿Le consta que se pudieron tumbar 30 artículos?

No me consta, pero no me sorprendería que fuera así.

¿Hasta qué punto los poderes del Estado eran conscientes de que la sentencia elevaría el conflicto…

Yo creo que no lo veían, porque ellos, en la relación con Catalunya, estaban aconstumbrados a una relación con un esquema de que cuando los necesitamos nos ayudan y cuando no los necesitamos, nos da igual. Estaban en esa lógica, creían que tras la sentencia seguiría funcionando todo igual. Hallarían a una CiU dispuesta a hacer el papel de siempre, que era el de ayudar a los gobiernos que lo necesitaran en Madrid a cambio de toda una serie de mejoras en temas de autogobierno o de interés español y catalán. Esta vez no calcularon bien las consecuencias.

"Seguramente había una sentencia más dura sobre la mesa, no me consta pero no me sorprendería; el Gobierno no hizo gran cosa para salvar ese Estatut"

A una parte del independentismo le pudo haber ido bien la sentencia del Estatut...

Es cierto. Si se hubiera mantenido el Estatut que se pactó y que el pueblo catalán refrendó y se hubiera aplicado con toda su potencialidad, estoy seguro de que el movimiento independentista no es que hubiera desaparecido de Catalunya, pero no hubiera cogido la fuerza que ha cogido. Para el independentista puro, que la tenía en la cabeza desde hacía décadas, la sentencia fue una bendición.

El presidente de la Confederació Empresarial del Tercer Sector Social, Joan Segarra, nos ha hecho una reflexión: "Durante estos diez años nos hemos centrado en el 'procés' y eso ha hecho que no trabajáramos lo suficiente el tema social. Si hubiera servido para avanzar... pero la frustración es doble: no hemos llegado y estamos donde estamos a nivel social".

Cierto, pero en medio ha habido una crisis durísima, sin la cual el tema social y económico se hubieran podido salvar mejor. El modelo de financiación no se ha renovado desde el 2014. Seguimos sufriendo una infrafinanciación histórica. No se cumplió el pacto del Estatut sobre inversión en infraestructuras. Y en el tema soberanista, estamos en el camino, y cuando estás en el camino no sabes si la cosa acabará bien o no.

"La autorítica se puede hacer en cómo se aplicaron los recortes, pero en si se tenía que recortar o no, no había tema"

Ha hablado de crisis. ¿Hace alguna autocrítica por los recortes que aplicó, teniendo en cuenta la situación actual de la sanidad, y que su asesor al respecto, el doctor Vilardell, ya dijo que no se tendría que haber recortado?

Autocrítica catalana no la puedo hacer porque, si la hiciera, faltaría a la verdad de lo que pasó. Las políticas de austeridad no se decidían en Catalunya, se decidían en Europa y, subsidiariamente, en Madrid. La primera reducción de sueldos públicos la hace Zapatero y el segudno tripartito. La autocrítica se puede hacer en cómo se aplicaron los recortes, pero en si se tenía que recortar o no, no había tema. Se tenía que recortar sí o sí.