El exjefe de la Udef apunta al exnúmero dos de la policía por el pendrive de los Pujol

El que era jefe de la Udef en 2015, el comisario ya jubilado Manuel Vázquez, no ha tenido problema en reiterar ante el tribunal que fue el subordinado del número dos de la Policía con Jorge Fernández Díaz como ministro del Interior quien le entregó el 'pendrive' con datos personales de Jordi Pujol Ferrusola entre los años 1997 y 2002. Añadió que al dárselo Bonifacio Díez Sevillano él creyó que procedía de su superior, el también acusado Eugenio Pino, porque era el modo habitual de trabajo en el cuerpo, aunque no le comentó nada. 

Vázquez dijo que fue algo después cuando Díez Sevillano le comentó que la memoria extraíble procedía de Método 3 y que lo que él hizo fue entregárselo al actual jefe de la Udef, el inspector José Manuel Álvarez Luna, entonces jefe de Blanqueo. Ambos lo vieron "en diagonal", tras lo que Álvarez Luna le comentó que no creía que hubiera material para abrir una investigación, pero que se lo pasaría al encargado de la abierta contra la familia Pujol en la Audiencia Nacional para cerciorarse. 

Ni Vázquez ni el resto de testigos han servido para aclarar el origen del dispositivo. Los exdetectives de Método 3 Antonio Tamarit y Julián Peribáñez negaron haber tenido cualquier participación en el pendrive, aunque admitieron haber colaborado en ocasiones con la Unidad de Asuntos Internos, a cuyo comisario entonces, <strong>Marcelino Martín Blas</strong>, identificó Pino como quien le dio una memoria extraíble que entendió procedente de la agencia de detectives; no la situó en 2015, sino en 2012-2013. 

Acusación definitiva

El juez del 'caso Pujol' ya determinó que, aunque Pino vinculara el aparato con Método 3, no formaba parte del procedimiento judicial abierto en Barcelona en relación con la agencia de detectives que grabó a la entonces presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, en una comida en un restaurante con Victoria Álvarez, expareja de Jordi Pujol Ferrusola, y que al declarar sobre las bolsas con dinero que dijo que este había llevado a Andorra dio comienzo al procedimiento. El juez José de la Mata lo apartó del procedimiento y remitió las actuaciones a los juzgados de Plaza de Castilla para que se investigara su origen.

La acusación particular que ejerce el primogénito del expresidente de la Generalitat elevará a definitivas sus conclusiones provisionales este viernes y solicitará una condena de dos años y medio de cárcel para Pino y Díez Sevillano por descubrimiento y revelación de secretos cometido por funcionario público.

Quien sí modificará su acusación será Podemos, que solicitaba 10 años y medio de cárcel contra Pino y Díaz Sevillano por los delitos de estafa procesal, falso testimonio y descubrimiento y revelación de secreto.

Según fuentes jurídicas, el cambio supondrá retirar a Díez Sevillano la acusación de falso testimonio, ya que como terminó siendo acusado no estaba obligado a decir verdad cuando lo compareció como testigo ante De la Mata. Además, la estafa procesal bajará en un par de años la petición de pena que conlleva al entenderse que quedó en una mera tentativa, ya que el juez impidió que la información contaminada formara parte de la investigación judicial.