EL LABERINTO CATALÁN

Puigdemont 'vuelve' ante el horizonte electoral

Carles Puigdemont, en el partido de rugbi entre la USAP de Perpinyà y el Rouen.

Carles Puigdemont, en el partido de rugbi entre la USAP de Perpinyà y el Rouen. / periodico

Daniel G. Sastre

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El país de la mayoría de los independentistas catalanes no se acaba en la frontera francesa, ni en los límites con Aragón o la Comunitat Valenciana. "De Salses a Guardamar y de Fraga a Maó", dice el viejo adagio para acotar el territorio de los 'Països Catalans'. Pues bien: Carles Puigdemont está desde este viernes dentro de esa área por primera vez desde que, hace dos años y tres meses, declarase la independencia y dos días después huyera a Bélgica. El 'expresident' protagoniza este sábado en Perpinyà, a apenas 30 kilómetros de territorio español, un gran acto que el soberanismo afronta con expectación pero muy dividido, por el choque interno de estrategias y por la inminencia de las elecciones.

Puigdemont aterrizó en Carcasona a primera hora de la tarde, protegido por su inmunidad como eurodiputado. A la espera de que el Parlamento Europeo resuelva sobre su extradición a España, el 'expresident' se ha visto con ánimo suficiente para pisar suelo francés. Sigue siendo uno de los principales actores de la política catalana, y se espera que este sábado en Perpinyà contribuya a aclarar el horizonte electoral de JxCat, su formación política. En el espacio posconvergente conviven ahora mismo diversas familias y propuestas; el acto debería servir para empezar a poner orden en el camino hacia las elecciones al Parlament.

"Hemos entrado en Catalunya", escribió poco después en Twitter, junto a una foto en la que se le veía junto al monumento llamado Porta dels Països Catalans de Salses.  Y luego fue aclamado en el partido que rugbi que enfrentaba a la USAP de Perpinyà con el Rouen.

Entre 70.000 y 100.000 asistentes

Puigdemont no estará ni mucho menos solo en el acto de hoy. El Consell de la República, la entidad que organiza formalmente el acto, espera que entre 70.000 y 100.000 catalanes del sur se desplacen a Perpinyà para ver a su referente político. Las autoridades de la ciudad francesa, que prácticamente doblará su población, seguirán de cerca el acto.

Pero los principales destinatarios del mensaje están al sur de la frontera. En la formación de Puigdemont esperan su discurso "entre la expectación y la confianza en que su mensaje sea revelador, esclarecedor". El 'president' Quim Torra, todos los 'consellers' de JxCat y todos los senadores y diputados en el Congreso y en el Senado del partido estarán en Perpinyà, y también Artur Mas. La semana que viene se prevén reuniones entre los principales representantes posconvergentes y el 'expresident' sobre las listas electorales.

Recelos de ERC y la CUP

Aunque el Consell per la República –un organismo creado para mantener viva la influencia política de los 'exiliados'- insiste en que no será un acto partidista ni de precampaña, tanto la lista de asistentes como el desarrollo previsto de la ceremonia alientan las suspicacias. Solo intervendrán en directo los tres candidatos de JxCat a las últimas elecciones europeas (Toni Comín y Clara Ponsatí, además de Puigdemont), mientras que los líderes de ERC, Oriol Junqueras y Marta Rovira, lo harán por vídeo. El partido republicano envía una delegación de perfil bajo: no estarán en Perpinyà ni el 'vicepresident' Pere Aragonès ni ninguno de sus 'consellers'. La portavoz parlamentaria, Anna Caula, y el líder del grupo municipal de Barcelona, Ernest Maragall, serán sus representantes. Y la CUP ni siquiera estará, porque "formalmente no participa del Consell per la República" y porque "ciertos partidismos se entrevén en el desarrollo de este acto".

A la espera de saber si Puigdemont tiene intención de encabezar la lista de JxCat, aunque sea de forma simbólica –Mas ya dijo hace unos días que, en ese caso, debería dejar claro que no podrá ser 'president' por su situación procesal–, Junqueras ya dio este sábado un paso en esa dirección. El líder de ERC afirmó que confía en la justicia europea para poder ser el aspirante de su partido.