La fiscalía se opone al nuevo permiso para Cuixart por su "lo volvería a hacer"

La Fiscalía de Barcelona se ha opuesto ante el juez de vigilancia penitenciaria a que se le conceda un permiso de tres días al presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, alegando su "ausencia de arrepentimiento" y que hubiero afirmado en el turno de última palabra del juicio del 'procés' que "lo volvería a hacer". Sostiene que "difícilmente se puede tener confianza de buen uso del permiso cuando el interno no asume el delito, persistiendo, por tanto, los factores que influyeron" en su  comisión. Aunque la valoración de cada recluso es individual, este criterio puede marcar el camino para las futuras peticiones de otros dirigentes independentistas encarcelados. El 'president' Quin Torra ha calificado de "indecente, perverso y siniestro" el rechazo a este. 

La junta de tratamiento de la cárcel de Lledoners, en Sant Joan de Vilatorrada, propuso la semana pasada un permiso penitenciario de 72 horas para Cuixart, salida que tiene que autorizar el juzgado de vigilancia penitenciaria. De concederse, este permiso se sumaría a la salida de dos días que Cuixart realizó el 16 de enero. 

En su escrito, el fiscal rechaza la posibilidad de que se le conceda este permiso a Cuixar porque, en su opinión, es "prematuro" porque la fecha de cumplimiento de la pena es lejana, a la vez que agrega como "factores negativos" el no reconocimiento del delito y el no haber realizado un programa específico de tratamiento en el centro penitenciario. La acusación pública insiste en la "no cabe desconocer la gravedad del delito cometido", pues "no todos los delitos son iguales, ni tienen el mismo reproche social".

Sanción efectiva

"La pena ha de identificarse por el conjunto social y por el afectado como una sanción efectiva, por lo que la concesión de permisos penitenciarios excesivamente anticipados hace ilusoria la finalidad de prevención" de que la pena se cumple", señala el ministerio público. Subraya que "la percepción" de Cuixar de que lo hechos ocurridos en la Conselleria d'Economia el 20 de septiembre del 2017 no fueron violentos, es contraria a lo declarado probado en la sentencia condenatoria. En su opinión, el dirigente independentista "hace su propia interpretación", no considerando que su actuación sea un delito, lo que supone "negar el estado de derecho".

Para la fiscalía resulta definitivas las manifestaciones de Cuixart, tanto en el Supremo como las que recoge el informe psicológico de la prisión, de que "lo volvería a hacer". En este sentido, resalta que el presidente de Omnium ha publicado desde la cárcel un libro titulado "Ho tornarem a fer", "lo que pone en evidencia, sin perjuicio de su libertad de expresión, su posicionamiento en relación al delito" por el que ha sido condenado. "Es evidente que en ningún caso se concedería un permiso a un interno que en relación al delito cometido manifestase que lo volvería a hacer en las mismas condiciones y por las mismas vías, máxime teniendo en cuenta la gravedad del delito y la pena, de nueve años, propia de delitos tales como homicidios, agresión sexual con penetración o salud pública en supuestos agravados de tráfico de estupefacientes".