Andalucía abrirá una delegación en Catalunya para hacer frente al "separatismo"

El Gobierno andaluz de PP y Cs pretende enarbolar la bandera del equilibrio territorial en el debate soberanista en Catalunya y este martes ha anunciado que abrirá una delegación en Catalunya para brindar atención a los andaluces emigrados “ante la difícil situación creada por el independentismo” en esa comunidad. “Vamos a estar más presentes que nunca en Catalunya”, lanzó.

El anuncio fue realizado por el presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno Bonilla, en una comparecencia parlamentaria para hacer balance del primer año de gobierno del bloque de derechas con el apoyo de la ultraderecha. En su intervención, el presidente andaluz justificó que Andalucía es la región con mayor población de España y “parte esencial” del país, una posición que “nos dota e impone una enorme responsabilidad en la defensa de la integridad territorial y de la igualdad en derechos y deberes entre españoles”.

En este sentido, Moreno Bonilla lamentó que iniciativas como la mesa bilateral entre el Gobierno de España y la Generalitat son “balones de oxígeno político” para el desafío independentista, de ahí que considere que Andalucía deba ejercer ese papel de fiel de la balanza incluso en Catalunya, donde residen más de medio millón de andaluces emigrados y sus descendientes.

El objetivo de esta delegación, precisó, será respaldar la cultura andaluza en Catalunya, además de abrir una puerta a los empresarios catalanes que ante esa difícil situación que viven buscan nuevos territorios para invertir. Fuentes de la Junta de Andalucía han explicado que la oficina, que se pretende abrir en breve, se ubicará en un edificio vacío que tenía el ejecutivo autonómico en Barcelona, por lo que el gasto será solo el del delegado que se encargue de llevarla.

Señalan además que era una antigua demanda de la comunidad de andaluces emigrados para “ayudarles en asuntos diversos”, y además de realizar “labores de asesoramiento” tendrá esa vertiente comercial para atraer inversión ante la inestabilidad económica que pueda generar en algunos empresarios el procés. Se trata del segundo guiño a la mayor comunidad de andaluces en el exterior en menos de un año, ya que los primeros presupuestos que sacó adelante el PP y Cs con Vox incluyeron una línea de ayudas para las asociaciones andaluzas en “zonas con problemas de inmersión lingüística”, conforme al acuerdo suscrito con Vox.

El anterior ejecutivo socialista ya tuvo una oficina comercial hasta 2012 en Catalunya, que cerró durante la crisis económica y que el PP atacó en numerosas ocasiones al considerarla un “despilfarro”. Sin embargo, ahora las cosas han cambiado, y a menos de un mes de la celebración del Día de la Autonomía, Moreno Bonilla ha sido el primero en enarbolar la misma bandera que sus antecesores del PSOE contra el agravio territorial y las asimetrías. Tanto que incluso ha parafraseado al que fuera primer presidente andaluz socialista, Rafael Escuredo, al asegurar que “no queremos ser más que nadie, pero tampoco menos que nadie”. Y eso pese a que desde el PSOE le han recordado que los populares no estuvieron de acuerdo con el Estatuto autonómico e incluso hicieron campaña en contra.