POLÍTICA LINGÜÍSTICA

Rifirrafe entre Torra e Iceta por la lengua

Eva Granados y Miquel Iceta escuchan a Torra en el Parlament, en una imagen de archivo.

Eva Granados y Miquel Iceta escuchan a Torra en el Parlament, en una imagen de archivo. / periodico

Roger Pascual

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Con Ciutadans en desplome, el PSC se quiere erigir como el faro antiindependentista en las próximas elecciones. Tras hacer varios gestos para pescar exvotantes en el revuelto río naranja, los socialistas han abierto el melón de la inmersión lingüística, tema que era para ellos tabú hasta ahora y una de las obsesiones de Cs desde su nacimiento. La polémica, generada desde que se conoció el viernes la idea de Miquel Iceta de "flexibilizar" la inmersión, ha vivido este domingo un nuevo episodio con el rifirrafe entre el líder del PSC y Quim Torra.

"¡Es una irresponsabilidad tan grande!", ha exclamado en Twitter el 'president' después de que el primer secretario del PSC acusara en RAC-1 que "parte del independentismo ha instrumentalizado el catalán". Iceta ha defendido la nueva propuesta socialista sobre la inmersión lingüística, denunciando que los nacionalismos "tienden a intentar usar la lengua como factor de enfrentamiento". La ponencia congresual aboga por "ampliar las horas de castellano e inglés de acuerdo con las necesidades de cada escuela", de tal modo que se consiga un "modelo plurilingüe" y "flexible" que concuerde con la realidad sociolingüística de Catalunya.

Después de que los socialistas volvieran a ser la segunda fuerza en las generales en Catalunya (y la primera opción no-independentista), Iceta quiere aglutinar al voto constitucionalista en las próximas catalanas, como hizo Inés Arrimadas en las de hace dos años. El próximo congreso del PSC, que celebrará del 13 al 15 de diciembre y en el que Iceta será el único candidato, será una buena puesta de largo de cara a los nuevos comicios que se divisan en el horizonte. El documento marco de la cita pone sobre la mesa un asunto que, aunque algunos sectores del partido reivindicaban desde hace muchos años debatir públicamente, no se había cuestionado de puertas afuera porque se consideraba material demasiado sensible.

"Hemos llegado a la conclusión de que necesitamos propuestas que llamen un poco la atención sobre problemas reales, como la inmersión", explica una fuente socialista. Aunque la mayoría ha querido ver en esta jugada un guiño a antiguos votantes de Cs, esta voz plantea que va dirigida al independentismo moderado. "Recuperando la propuesta de Josep Bargalló ['conseller' d'Educació], que fue muy criticada por los partidarios del manifiesto koiné [que aboga porque el catalán sea la única lengua oficial en Catalunya], es una forma de dejar en evidencia la contradicción entre ambos los moderados y los 'koinés'".

"Se buscan los 250.000 votos fronterizos con Cs"

De todas formas, varios de los consultados consideran que al abordar "un tema tan delicado" como la inmersión "se buscan los 250.000 votos fronterizos con Cs" ante el desplome del proyecto naranja. Un gesto que iría en la línea de la participación en las manifestaciones antiindependentista de Societat Civil Catalana o el endurecimiento del discurso contra los separatistas. 

"Ya dejamos la ambigüedad cuando apoyamos el 155 [por mucho que José Montilla no lo votara en el Senado]", rebate otra voz del partido. "Hemos endurecido el discurso porque se ha endurecido la fractura en el país", coincide otra fuente consultada, que considera que es igual de reprobable que el exministro José Ignacio Wert hablara de "españolizar a los niños catalanes" como los que "quieren nacionalizar a los niños en las escuelas". En este sentido destaca que su propuesta educativa no tiene que ver nada con la de Cs o el PP, sino que sigue la propuesta aparcada por Bargalló de intentar mejorar la inmersión lingüística, flexibilizándola para adaptarse a la realidad de cada entorno. 

Malestar en el socio parlamentario

Pese a que Iceta haya incidido que no se pretende abandonar el modelo actual, la propuesta ha generado malestar en Units per Avançar, socio de los socialistas en el Parlament. La formación ya le trasladó a Iceta su preocupación por este asunto, ya que consideran que es un "demasiado sensible" y que no hay que tocar "ni una coma" sobre la inmersión ni moverse la Ley de Educació de Catalunya. "Si esto se alterase nosotros no podríamos mantener esta vinculación, pero no lo decimos como un aviso, sino como la reafirmación de una posición política", señaló el sábado Ramon Espadaler, diputado del grupo de PSC-Units per Avançar en el Parlament.