CONVERSACIÓN EN EL FORO ATLÁNTICO

Rajoy y González piden generosidad a los partidos para recuperar la estabilidad

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Pilar Santos

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Era la primera vez que charlaban de esa manera tan tranquila en público. Mariano Rajoy (PP) y Felipe González (PSOE) juntos, conversando casi durante dos horas ante un auditorio que le ha reído las bromas y alguna fanfarronada dicha con gracia, como cuando el expresidente socialista ha soltado que ellos dos, ante una situación política tan enrevesada como la actual, habrían actuado, "como mínimo", como Winston Churchill. Esa broma sobre el exprimer ministro británico ha llegado en los últimos minutos de la charla que más atención ha copado del cartel de la primera edición del Foro La Toja-Vínculo Atlántico, organizado en la provincia de Pontevedra. 

Los dos exjefes de Gobierno han tenido la oportunidad de tocar varios asuntos y, con amplitud, el de la repetición electoral. Ambos han coincidido en la necesidad de reclamar a los partidos políticos generosidad para recuperar la estabilidad política y olvidar el "bloquismo", expresión utilizada por González. 

La gran coalición

Rajoy, que fue presidente entre 2011 y 2018, cree que "no es posible" gobernar sin mayoría y ha considerado necesario "un pacto" para cuatro años" con "arreglo" a lo que digan los españoles en las urnas el 10 de noviembre. En este contexto ha recordado que él ya propuso al PSOE en 2015 una gran coalición, pero Pedro Sánchez la descartó. La defendió ante la dirección de su partido porque consideraba que había llegado el momento de que los españoles siguieran la estela de otros países europeos y rompieran esa "tradición absurda" mantenida hasta entonces (y hasta ahora) por los dos grandes partidos. 

"Tienen que facilitar que se forme Gobierno. Si es de mayoría, mejor; y si no es de mayoría, se pueden pactar los temas fundamentales en la relación con Europa y en algunas reformas estructurales que están demasiado retrasadas. Eso se puede pactar, aunque no se esté en el Gobierno", ha manifestado González, que estuvo en la Moncloa entre 1982 y 1886. Rajoy ha mostrado estar de acuerdo en ese acuerdo de mínimos para evitar el bloqueo. 

Eso sí han discrepado cuando la moderadora, la abogada Miriam González, les ha preguntado si ellos dos habrían podido alcanzar esa gran coalición. González ha admitido que él no habría sido capaz mientras que Rajoy ha afirmado que considera que sí habría podido llegar a un pacto con el exsecretario general socialista.

Los sentimientos nacionalistas

El desafío territorial también ha ocupado una parte de la charla. Rajoy ha disertado sobre la dificultad de "luchar contra un sentimiento" nacionalista aunque ha añadido que, ante la "colisión entre sentimientos, la ley es la que ordena la convivencia". "Es lo que procede aplicar en los tiempos en que vivimos", ha sostenido antes de recordar que él aplicó por primera vez el 155 y mostrarse optimista: "La cosa, por más problemas que puedan generarse ahora con ocasión de la sentencia, está yendo a mejor". 

González ha seguido con ese hilo y ha declarado que los "sentimientos son respetables", pero "no son derechos". El vetarano socialista rechazó la idea de que la democracia esté por encima de la ley, máxima repetida por parte del independentismo, porque "así han empezado todas las tiranías". El popular rechaza la reforma de la Constitución dada la arquitectura parlamentaria mientras que el socialista defendió la mejora del artículo 155 de la Carta Magna por si hay que volver a aplicarlo. En este punto ha revelado que nadie puede imaginar las horas que han llegado a hablar Rajoy y él sobre el desafío catalán, dando a entender que el político gallego le llamó en 2018, cuando se celebró el referéndum del 1-O. "Yo siempre he estado y estoy disponible si el presidente del Gobierno, sea quien sea, igual que si me llama el Rey. Por responsabilidad institucional. Si no llama, yo no interfiero", ha asegurado negando que quiera ser un "jarrón chino" y "estorbar". Habría que ver qué ha pensado Sánchez al ver la bromita de Churchill