"La democracia se toca"

El Gobierno impulsa una campaña exterior para ensalzar a España antes de la sentencia del 'procés'

Irene Lozano

Irene Lozano / periodico

Europa Press

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La Secretaría de Estado de España Global ha empezado a difundir fuera de España, fundamentalmente a través de las embajadas y los institutos Cervantes, su campaña "La democracia se toca", una serie de vídeos en los que, en palabras de su responsable, Irene Lozano, los españoles "se cuentan a sí mismos" y para dejar patente que España es un país moderno, plural y democrático.

El lanzamiento de la campaña puede verse en las redes sociales de las embajadas españolas. La de Estonia organizó la primera proyección en el Centro Picasso de Tallin ayer miércoles y este jueves habrá otra en el Cervantes de Estocolmo. En la Embajada en Buenos Aires y en el Cervantes de Dublín se emitirán el lunes 7 y en el de Roma, con la participación del embajador y ex ministro Alfonso Dastis, el 10 de Octubre. El Cervantes de Viena también ha anunciado proyecciones.

La campaña ha empezado a difundirse fuera de España y se prevé que siga en marcha durante todo 2019. El primero de los vídeos que forman la campaña lo presentó Lozano en Madrid junto a la exalcaldesa de Madrid Manuela Carmena y el cineasta Juan Antonio Bayona, el pasado 12 de septiembre. Ahora, las fuentes consultadas explican que, con las Cortes disueltas, están pendientes de saber si pueden utilizar todo el material dentro de España, pero fuera consideran que no hay problema porque la campaña comenzó antes de que se disolvieran las Cortes.

Pendienets de la sentencia del 'procés'

Los cuatro vídeos han empezado a circular por embajadas y sedes del Cervantes precisamente en un momento en que se espera que el Tribunal Supremo dé a conocer la sentencia del juicio a los políticos procesados por intentar la independencia de Cataluña. Es previsible que el independentismo prepare una reacción también fuera de España.

Se trata de complementar los datos "racionales" sobre la calidad democrática de España con "el aspecto emocional". "Se dice que el nacionalpopulismo está ganando porque agita las emociones y nosotros solo tenemos la razón", argumentaba. Con todo, discrepó de ese análisis y ha opinado que, en tal caso, la batalla es "entre la razón y la superstición, no la emoción".