Aznar-González: combate por el bipartidismo en vísperas de la investidura

Estaban convocados para reflexionar en voz alta sobre los desafíos de la revolución digital encima de un escenario con forma de cuadrilátero rodeado de público, que recordaba de forma tentadora a un ring de boxeo. Conociéndoles, la cita permitía augurar un combate lleno de golpes bajos cargados de rencor, pero el encuentro que Felipe González y José María Aznar mantuvieron este miércoles en el foro DigitalES, organizado por la patronal de las telecos españolas, ni se centró en la tecnología, sino en la política, ni hizo aflorar discrepancias entre los dos ex presidentes, sino guiños de complicidad y un común acuerdo en el diagnóstico.

Según los antiguos mandatarios, todo lo que España ha logrado en las últimas décadas lo puede tirar por la borda si la clase política actual sigue mostrándose "incapaz de llegar a acuerdos desde la centralidad". La imagen de David Bowie cantando ‘Heroes’ en una pantalla gigante dio la bienvenida a los políticos al debate, que estuvo moderado por el ex ministro de Defensa de Aznar, Eduardo Serra. En realidad, los combatientes no iban a necesitar árbitro alguno que mediara, porque la cordialidad reinó entre ambos desde que González rompió el juego refiriéndose a su contertulio como "ese señor que me hizo el favor de sacarme del Gobierno", ante la sonrisa del ex líder popular.

Aznar y González alertan de los riesgos de un Gobierno parado

Pero los antiguos dirigentes no habían venido a tirarse flores ni a ejercer de discretos jarrones chinos, sino que traían en el bolsillo un severo rapapolvo para soltárselo a los políticos de hoy. La excusa la brindaba el reto tecnológico, objeto del debate que González usó raudo de capote para lanzarse y avisar: "Ningún país puede hacer las reformas que exige ese reto sin las mayorías necesaria para llevarlas a cabo". Aznar subió la apuesta: "En este país hemos decidido que si podemos estropear las cosas, las vamos a estropear. Algunos están dedicados a socavar los pilares del éxito logrado", sentenció.

Repaso a los políticos actuales

Han pasado 25 años del "váyase, señor González" y de los agrios debates que libraban a cara de perro en el Congreso. Ninguno los ha olvidado, y de hecho los dos los sacaron a colación pero, en opinión de ambos, aquellas legendarias disputas tenían el peligro de una refriega de patio de colegio comparadas con el clima de cisma que se respira en la política actual. "Este señor y yo peleamos mucho, pero en el bipartidismo buscábamos la centralidad. Ahora tenemos un pentapartidismo de dos bloques, y los bloque no buscan la centralidad, sino el antagonismo, que siempre termina premiando al que está en el extremo más alejado de cada bloque", comparó González. Aznar subrayó: "Nosotros discutíamos mucho, pero lo hacíamos desde la centralidad y compartiendo los objetivos importantes para el país".

En vista de que no necesitaba aplacarlos, Eduardo Serra cambió de papel y se dedicó a azuzarlos: "¿Está fallando la clase política?", les lanzó entre aplausos del público. González miró a Aznar y bajó el diapasón para ponerse en modo abuelo-cebolleta. "Cuando yo empecé en política, también nos decían que la generación anterior, la de Adenauer, era mejor", contó, y continuación entró a matar: "Vamos a acabar 2019 con cuatro elecciones en cuatro años. No

se puede convocar a los ciudadanos a votar hasta que aprendan. Oigan, aprendan ustedes a administrar el voto que les dan. Entran ganas de hacer como en el colegio y mandarlos al rincón de pensar".

Lo que iba a ser un combate entre dos contertulios, de pronto se había convertido en una soberana paliza de ambos contra un tercero ausente, al que nadie puso nombre ni siglas, pero contra el que cargaron de lo lindo. "Desde hace cinco años, en España no se toma una decisión sobre un tema importante, y las que se toman, van en la dirección equivocada", bramó Aznar, y añadió: "No tenemos gobierno desde hace tres meses, ni una mayoría conformada para tomar las decisiones necesarias. Rizando el rizo de estropear las cosas, no tenemos gobiernos ni en Murcia, ni en Madrid ni en La Rioja. Esta hoguera de disparates que estamos viendo no la recuerdo, la irresponsabilidad política hoy es máxima".

Sentirse 'viejoven'

Llegado un momento ardiente del debate, y tras una nueva cascada de mandobles a cuatro manos contra los líderes actuales, González miró a Aznar y dejó caer: "Estoy preocupado de que estemos tan de acuerdo", provocando una carcajada general entre el público. En algo, al menos, no coincidieron. El socialista reconoció que se siente viejo desde que ha de agachar la cabeza y mirar al suelo para caminar sin caerse, a lo que Aznar respondió: "Pues yo me siento muy joven". "Claro, es que tú haces mucho ejercicio", alegó González. Visto el nivel de consenso que había entre los contertulios, Serra les invitó a cerrar el debate. "Yo creo que debe cerrarlo él, que es el…", balbuceó Aznar sin que González le dejara acabar: "¿El gurú? Pues hala, ya está cerrado", zanjó el socialista antes de bajar del

cuadrilátero codo con codo de su antiguo oponente.