El Govern descarta elecciones y apunta al presupuesto del 2020

Un destacado dirigente de la posconvergencia (del PDECat, concretamente) reflexionaba la semana pasada sobre la inestabilidad del Govern a raíz de la enésima crisis entre JxCat y Esquerra Republicana. Y concluía que la supervivencia del Ejecutivo de Quim Torra sobreviviría no depende tanto de la discrepancia con los republicanos en cuanto a pactos, ni de la capacidad de trenzar una respuesta unitaria del independentismo a la sentencia del 1-O, sino de que sea capaz de tener presupuestos, dado que el Govern trabaja con las cuentas del 2017 prorrogadas.

La falta de cuentas públicas es lo que llevó al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez a disolver las cortes. Y es lo que genera consecuencias diarias para la ciudadanía, como quedó demostrado este martes al anunciar la portavoz del Govern, Meritxell Budó, que se incumplirá la reducción de horas lectivasa a los profesionres mayores de 55 años. Esta es una más del goteo de restricciones que impone el Govern a decenas de medidas sociales. No en vano, la Confederació Empresarial del Tercer Sector trabajan con presupuestos congelados desde hace diez años.

Sin lineas rojas

Así las cosas y para tratar de superar la posibilidad de unas posibles elecciones anticipadas (que ERC quiere que se decidan, si es el caso, consensuadamente), Budó anunció que una vez más el Ejecutivo de coalición independentista se propone intentar acordar unas cuentas públicas. Lo hizo, sin registrarlas en el Parlament como es preceptivo, hace unos meses, con un éxito nulo. Ni la CUP, aliado del frente independentista, se avino a plantearse el apoyo al proyecto que desgranó el vicepresidente del Govern, 'conseller' de Economía y dirigente de ERC, Pere Aragonès.

La oferta ahora llega sin lineas rojas, una semana después de que JxCat las dinamitara al pactar con el PSC el gobierno de la Diputación de Barcelona, para enojo de ERC y de parte del soberanismo cívico. Así pues, Budó anunció este martes: "No nos cerramos a buscar alianzas que nos ayuden a poder aprobar los presupuestos dado que en estos momentos no tenemos esta mayoría parlamentaria, por tanto estamos abiertos a estas negocaiciones y en los próximos días trabajaremos en cuál ha de ser nuestro socio preferente y alianzas; claro que hay preferencias o prioridades políticas pero no excluyentes".

La oposición, crítica

La noticia llegó sin concreción sobre el calendario de trabajo de Aragonès y el contenido de la nueva oferta presupuestaria. En cualquier caso, no le será fácil al Govern hilvanar una mayoría parlamentaria. Fuentes de la CUP se mostraron gélidas y apuntaron que la inacción política del Govern y argumentaron que el proyecto de contratos de servicios que consolida, según los anticapitalistas, la externalización, así como el decreto de regularización de precios de alquiler que rechazan incluso colectivos favorables a esta iniciativa porque favorece el precio de mercado, no invitan a que la CUP se replantee abrir la puerta a los presupuestos, informa Júlia Regué.

Fuentes de los 'comuns' también advirtieron al Govern de que si bien están dispuestos a sentarse a negociar, no lo harán con unas cuentas "convergentes", como las que, según este grupo, se ofrecieron meses atrás. Además, los 'comuns' ven poco creíble la mano tendida del Govern porque parte del Govern está reclamando elecciones.

Por su parte, el PSC también se mostró distante. Fuentes socialistas se limitaron a apuntar que lo primero que ha de hacer el Govern es hacer público el proyecto presupuestario, informa Roger Pascual.

Mientras, y respecto a la polémica sobre la convocatoria de elecciones, la portavoz aseguró que esta no es la voluntad del Govern y que corresponde a Torra en exclusiva la decisión de avanzar la cita con las urnas. "No se ha puesto sobre la mesa la conovocatoria de unas elecciones", aseguró respecto a las distintas reuniones internas de los dos socios del Govern.