ELECCIONES AUTONÓMICAS

Ximo Puig: "Ha sido complicado pero la Comunitat Valenciana vuelve a ser la 'senyera' del cambio"

PSPV gana las elecciones autonómicas de la Comunidad Valenciana

Ximo Puig, eufórico tras confirmarse el triunfo del PSPV en la Comunidad Valenciana y la posibilidad de reeditar el Botànic / periodico

Nacho Herrero

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Eran casi las tres de la mañana y Ximo Puig apareció por fin en el escenario que el PSPV había montado en una céntrica y coqueta plaza de València. Lo hizo recibido al grito de 'Ximo president!' porque a esa hora ya nadie dudaba que el secretario general del PSPV volverá a encabezar un gobierno de progreso, la segunda edición del 'Pacte del Botànic' con Compromís y Unides Podem EUPV.

Pero el bloque de izquierdas tuvo el susto en el cuerpo casi hasta el final. El recuento de los votos de las elecciones generales daba al bloque de derechas una ligera ventaja, pues el PP, Ciudadanos y VOX juntaban 1.301.247 votos frente al 1.297.716 del de izquierda. Pero en la urna autonómica hubo vuelco y, tras cuatro años de gestión, los partidos del Botànic sumaron 1.290.139 votos, frente a los 1.250.741 de los de enfrente. Cuarenta mil votos de diferencia que se traducen en una victoria en escaños por 52-47, frente al 55-44 de 2015.

"Ha sido duro, complicado -dijo un eufórico Puig- pero la Comunitat Valenciana vuelve a ser 'senyera' del cambio". Su apuesta por una peculiar singularización de la convocatoria electoral, por primera vez por libre respecto al resto de autonomías pero junto a las generales, le salió perfecta.

"Es un día de profundas emociones. Hemos hecho posible que el PSOE sea el primer partido de la Comunitat y de España, y por eso quiero dar las gracias a los compañeros desde la Vega Baja al Maestrat, a todo el territorio y a todas las personas que lo han hecho posible", señaló antes de agradecer especialmente a las mujeres que se haya frenado a la ultraderecha.

Su ascenso de 23 a 27 diputados le convierte en la primera fuerza política valenciana por primera vez desde 1991 y despeja las dudas sobre qué partido debe liderar el pacto pues el 'efecto nacional' le pasó factura a Compromís, que bajó de 19 a 17 diputados. Eso sí, el PSPV se quedó con cuatro puntos menos de porcentaje que el PSOE y se dejó más de cien mil votos.

La lectura de sus socios principales era notablemente diferente. Tras confirmarse la caída de Compromís de 19 a 17 diputados, y esfumarse la posibilidad de reclamar la presidencia, Mónica Oltra aseguró que los valencianos habían "estado a la altura y no han permitido que determinados experimentos partidistas pongan en peligro el cambio". No será fácil reestablecer las complicidades que rompió el unilateral adelanto electoral.

Compromís consiguió transformar sus malos resultados en el Congreso, sólo un diputado y 6'49% de voto, en unos entre regulares y aceptables en la urna autonómica, en la que alcanzó un 16,45% de apoyo y pasó de 172.751 votos a 439.459.

Oltra se felicitó además porque, a diferencia de lo que pueda psar en Madrid, en la Comunitat sólo hay una opción. "No hay experimentos posibles. Las derechas no suman y el PSPV tampoco suma con otros, con Ciudadanos no suma", recalcó. Esa será su fuerza en la negociación.

El otro socio, Unides Podem EUPV, pedirá pasar de apoyo externo a interno en el ejecutivo y dio por buenos sus 8 diputados pese a que Podem venía de conseguir 13 en solitario. Es lo que tiene que las encuestas les fueran tan mal. Rubén Dalmau, su cabeza de lista, señaló que habían "frenado a la derecha" "conseguido los objetivos marcados en campaña", porque "algunas" preveían que la formación no tuviera representación. Son menos pero igual de imprescindibles para un pacto de izquierda.

Triste consuelo de la derecha

En el bloque de la derecha, el PPCV pese a perder doce diputados y bajar de 31 a 19 logró mantenerse como líder de la oposición. Además, el partido de Isabel Bonig logró rascar ocho mil votos más de los que sacó su partido a nivel nacional. Los problemas de Pablo Casado le dan margen.

Descartó "absolutamente" dimitir y se limitó a calificar como "no buenos" los resultados, tras achacarlos a "la fragmentación".  "No ha sido fácil llegar hasta donde hemos llegado con la historia y la mochila que tiene el PP, especialmente en la Comunitat Valenciana. Si al Botànic les dicen que llegan por la mínima y de penalti, no se lo hubieran creído", afirmó.

En la sede de Ciudadanos había euforía pese a que su ascenso no les da demasiado rédito. Pasan de 13 a 17 diputados pero no pasan al PP pero Toni Cantó se vio ganador por superar...a Compromís. "Hemos ganado al nacionalismo", dijo en referencia a este partido y antes de culpar al de Bonig de no gobernar por haberse "hundido".

Por su parte, VOX irrumpe con 10 diputados y José María Llanos, su líder, prometió "dar guerra" en Les Corts y especialmente a los "parásitos" de la política. Acabó su discurso con vivas al Reino de Valencia y a España, aunque se dejó casi cincuenta mil votos respecto a los conseguidos en las generales.