Casado acusa a Sánchez de estar "patrocinando la sedición"

En el primero de los tres discursos que pronunciará este Martes Santo, Pablo Casado ha vuelto a usar el independentismo catalán como uno de sus ejes principales de campaña. No hay mitin en el que el líder del PP no recuerde el apoyo que ERC, PDECat y Bildu dieron al actual presidente, Pedro Sánchez, en la pasada legislatura. En Ciudad Real, en una sala de un hotel llena de más de mil personas, Casado ha afirmado esta mañana que el candidato del PSOE no solo no "evita" sino que está "patrocinando la sedición al seguir dialogando con estos 'Torras' [en referencia al 'president', Quim Torra] que les entregan documentos que ocultan, al estar pidiendo apoyo a [Arnaldo] Otegi a los reales decretos o no estar rechazando indultos a aquellos que siguen en un proceso de independencia en Catalunya".

Por todo esto, ha pedido en esta ciudad de Castilla-La Mancha, donde el CIS augura un batacazo de los populares (de 12 a 5), la subida de los socialistas (de 7 a 9) y la irrupción de Vox, con 4, que le voten los "defraudados por la deriva independentista del PSOE".

La prisión permanente revisable

Entre los asistentes se encontraba Juan José Cortés, número uno del PP al Congreso por Huelva. El candidato, padre de la niña Mariluz, aseguró este lunes que Sánchez "se sienta a la mesa con asesinos, criminales, violadores y pederastas que va a intentar dejar salir a la calle cuando quite" la prisión permanente revisable que Mariano Rajoy incluyó en el Código Penal en 2015. Cortés se ha reafirmado en sus palabras este martes en declaraciones a la Sexta.

En su alocución, Casado ha saludado a su "amigo" Cortés y, después de recordar a otras víctimas como Diana Quer y Marta del Castillo, ha prometido que si llega a la Moncloa ampliará esa pena para otros cinco nuevos delitos: la desaparición forzada de personas en su régimen más grave de secuestro o detención ilegal con posterior asesinato, el asesinato con ocultación del cadáver, las violacaiones en serie, la agresión sexual de un menor tras privarle de libertad o torturarle y los incendios que pongan en peligro la vida de las personas.

"Esto es una democracia. Estarán en la cárcel hasta que estén reinsertados (...) Nuestros hijos no tienen que pagar las leyes inadecuadas que parece que están más cerca del buenismo con los violentos que con la justicia con las víctimas", ha declarado Casado.

El Gobierno de Sánchez decidió no derogar la prisión permanente revisable y esperar a que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre la impugnación, que los socialistas interpuso en 2015.