Arrimadas desata una bronca en la Mesa del Parlament

Inés Arrimadas se enzarza con el vicepresidente del Parlament

Inés Arrimadas discute con el vicepresidente del Parlament, Josep Costa. / periodico

Xabi Barrena

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Bronca comparecencia de Quim Torra para dar cuenta de los cambios obrados en su Govern a cuenta de la marcha a la política española y barcelonesa de Laura Borràs y Elsa Artadi, respectivamente. La inusitada irrupción del vicepresidente primero del Parlament, Josep Costa (JxCat), en funciones de árbitro del hemiciclo por una breve ausencia del titular, Roger Torrent (ERC), encendió el debate.

Discurría este por los parámetros normales. Es decir, la jefa de la oposición, Inés Arrimadas orillaba el relevo del Govern para recordar, una vez más, los escritos pretéritos de Torra. Aquellos de inconfundible tufo xenófobo en el que se tilda de “bestias” a los castellanoparlantes que impiden la plenitud nacional catalana. Fue en este momento en que Costa, quizá ajeno a que Torrent no ha abierto nunca la boca cada vez que Arrimadas ha blandido los escritos, se permitió interrumpir y reprender a la diputada.

Esta, evidentemente, no aceptó censura alguna sobre palabras que no eran suyas, sino del propio ‘president’. Y el follón se fue extendiendo hasta la propia Mesa del Parlament donde el videpresidente segundo, José María Espejo-Saavedra, se las tuvo con el propio Costa.

Al final del turno de Arrimadas, todos los grupos de la oposición afearon a Torrent, que había vuelto a su asiento, el incidente y el papel de Costa.

Firmante de Koiné

En cuanto al contenido del debate, Arrimadas calificó a Mariàngela Villaonga i a Meritxell Budó de “dignas sucesoras” de Borràs y Artadi, respectivamente. La primera por ser firmante, también, del manifiesto Koiné, aquel que abogaba por la oficialidad única del catalán en Catalunya. Y a Budó por haber arremetido, hace siete años, por Twitter, contra el uso del castellano por parte de Albert Rivera.

Todo ello llevó a la jefa de la oposición a darles sarcásticamente “la bienvenida al peor Gobierno del mundo”. Arrimadas acabó con un mensaje al propio Torra. “Lidera usted el Govern de la desobediencia, pero que no satisface a nadie”, en referencia a su pulso por los lazos con la Junta Electoral central.

En la réplica, Torra replicó que para fracaso, como Arrimadas había tildado la gestión del actual 'president', el de la lideresa de Cs. "por no haber sabido qué hacer con su victoria electoral, ni saber armar una mayoría a su alrededor", aseveró Torra para sentenciar que la prueba del nueve de este fracaso es que "arrimadas se va a Madrid".

El 'presdient' también respondió a las reiteradas peticiones de la oposición, singularmente de Miquel Iceta y de los 'comuns', de que convoque elecciones o se someta a una cuestión de confianza. Ahí, Torra se gusta cuando reta a estos partidos "a articular una mayoría alternativa", que debería unir a Cs con la CUP, por decir algo. "Podrían elegir" se dirigio a Iceta, "a Arrimadas...ah, no! que se marcha a Madrid"..."además, Ciudadanos exige su dimisión por haber dicho lo de la necesdidad de buscar una solución democrática si el independentismo alcanzaba el 65%" sentenció burlón Torra.