LA POLÉMICA DE LOS LAZOS AMARILLOS

Budó: "No sé si estamos peor o mejor, estamos determinados a seguir con nuestra voluntad"

Esla Artadi y Meritxell Budó

Esla Artadi y Meritxell Budó / periodico

Fidel Masreal

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La nueva 'consellera' de Presidència y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha defendido la gestión del Govern y del 'president' Torra en la polémica sobre la supresión de los lazos amarillos y 'estelades' ordenada por la Junta Electoral Central (JEC). "No esperábamos otra cosa de la justicia española", ha alegado sobre la decisión del Supremo de no atender las alegaciones de Torra y ha acusado a Ciutadans de estar "obsesionados con el color amarillo". Preguntada sobre si el Govern está peor o mejor tras la polémica, ha respondido: "No se si estamos peor o mejor ,estamos determinados a seguir con la misma voluntad".

Preguntada sobre si en el Govern ha habido autocrítica por la polémica, Budó ha insistido en la "determinación de seguir permitiendo que los trabajadores de los centros de la Generalitat se puedan manifestar libremente porque el espacio público ha de ser libre y no neutral, defendemos esta libertad de expresión".

Budó ha minimizado los casos de incidencias en algunos centros educativos por la retirada de lazos: "De 2.600 sólo ha habido problemas en siete. Es un porcentaje menor, se está revisando la actuación llevada a cabo. Se seguirán los procedimientos establecidos en los Mossos". Y respecto a la querella anunciada por Torra, ha afirmado que "esta semana el ‘president’ presentará la querella contra la JEC, tal como anunció el viernes. No quitamos ni ponemos lazos. Se deja trabajar, hacer, a nuestros trabajadores, estamos comprometidos con la libertad de expresión y de derechos fundamentales".

Plan de contingencia

La portavoz ha afirmado que se está trabajando en el Govern, en comisiones bilaterales, para aprobar un plan de contingencia ante la falta de presupuestos del Govern para este año. Budó ha pedido al PSC que presione al PSOE para que el Gobierno haga efectivo los avances económicos para que Catalunya disponga de la parte proporcional del mismo. El objetivo con este plan es poder afrontar retos como el refuerzo de la FP o la renta mínima, aunque se siga trabajando con las cuentas del 2017 prorrogadas.