INICIO COMPLICADO

La sombra de ingeniería fiscal planea sobre Pepu Hernández

pepu-hernandez

pepu-hernandez / periodico

Juan Ruiz Sierra

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Pepu Hernández, el precandidato del PSOE al Ayuntamiento de Madrid apadrinado por Pedro Sánchez, no está teniendo un comienzo sencillo. El exentrenador de la selección española de baloncesto, designado por el presidente del Gobierno en un proceso llevado con extremo secreto, no ha sido bien recibido por amplios sectores del socialismo madrileño, que no entienden por qué el presidente del Gobierno se ha tomado tanto tiempo en mover ficha, ni tampoco comparten que haya optado por un independiente. Hernández, que aún debe someterse a primarias, se vio obligado a enfrentarse este jueves a un nuevo mal trago: la publicación de supuestas maniobras de ingeniería fiscal, denunciadas en el pasado por Sánchez cuando era jefe de la oposición, a través de una sociedad limitada.

En octubre del 2006, Hernández creó la mercantil Saitama, nombre de la ciudad japonesa en la que el combinado nacional ganó el Mundial frente a Grecia, usándola para cobrar por derechos de imagen, publicaciones y charlas de motivación empresarial, según desveló 'El Confidencial'. El movimiento le permitió tributar por estos ingresos al 25% del impuesto de sociedades, en lugar de al porcentaje, mucho más elevado, que le correspondería según el tipo máximo del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). También compró a través de esta sociedad un terreno rústico en Ribadesella (Asturias), donde veranea desde que era niño, según reconoció el equipo del precandidato.

Tanto el entorno de Hernández como la dirección del PSOE, que alienta su candidatura dejando de lado la obligada neutralidad ante unas primarias que no se han celebrado, se apresuraron a defender este comportamiento. No se trata, dijeron, de "ninguna irregularidad". Hasta donde se sabe, es cierto. El problema se encuentra en el listón ético colocado por el propio Sánchez, que hizo dimitir a Màxim Huerta como titular de Cultura Màxim Huertaa las dos semanas de haber tomado posesión en un caso que presenta similitudes con este caso, aunque el exministro, a diferencia del entrenador de baloncesto, fue condenado por la Agencia Tributaria.

En el 2015, el presidente del Gobierno, entonces líder de la oposición, cargó contra este tipo de comportamientos. Anunció que expulsaría a todo aquel que cayera en ellos. "Si yo tengo en la ejecutiva federal de mi partido, en mi dirección, a un responsable político que crea una sociedad interpuesta para pagar la mitad de los impuestos que le toca pagar, esa persona al día siguiente estaría fuera de mi ejecutiva. Ese es el compromiso que yo asumo con mis votantes y también con los españoles", dijo.

"¿Está Hernández en condiciones de ser candidato?", le preguntaron este jueves al presidente del Gobierno en México, donde se encontraba de visita oficial. No contestó.

La "picadora de carne"

Las explicaciones vinieron de Adriana Lastra, la vicesecretaria general, que subrayó que no había "ninguna irregularidad" en el comportamiento del aspirante. "¡Ya está bien de atacar a la gente por acercarse a la política! –exclamó-. Cuando valorábamos la disposición de Pepu a ser candidato, yo reflexionaba que ahora iba a enfrentarse a muchas cosas. Entre otras, a la picadora de carne que es la política".

La consigna es cerrar filas con el precandidato e impulsarlo casi como si fuera ya el aspirante oficial, pese a que todavía no se ha sometido a primarias, en las que se enfrentará con casi total probabilidad a Manuel de la Rocha, exalcalde de Fuenlabrada. El domingo, Sánchez participará en un acto con Hernández en el centro de Madrid. ¿Neutralidad? "Nadie puede poner en duda la neutralidad del proceso –contestó Lastra-. Ahora bien, esta comisión ejecutiva tiene opinión: el mejor candidato es Pepu Hernández".