Puigcorbé culpa a Bosch de haberle "apuñalado por la espalda"

El ya conseller de Acción Exterior de la Generalitat, Alfred Bosch, se ha despedido en el pleno municipal de sus compañeros de partido y del resto de grupos asegurando que siempre ha procurado actuar desde el respeto y la cortesía: "Que me comprendan los rivales y me duren los amigos". No ha opinado así el exedil de ERC y concejal no adscrito desde que el partido le expulsó del grupo municipal en junio, Joan Josep Puigcorbé, que ha asegurado que recibió una "puñalada por la espalda en una de las actuaciones más vergonzosas y sin precedentes" de Ayuntamiento y Diputación de Barcelona, de la que era diputado de Cultura.

Ha dicho que el informe de la Diputación que afirmaba que menospreciaba a trabajadores fue un informe paralelo encargado contra él por un amigo y jefe de campaña de Bosch, que pidió a los firmantes de un manifiesto en su defensa que se retiraran, según Puigcorbé: "No es que se saltaran la presunción de inocencia, es que eran los acusadores, como todo el mundo sabe perfectamente".

"Creo que ha cometido un grave error. Le pido, por favor, que se retracte", ha dicho el concejal al recién nombrado conseller, que ha escuchado el resto de intervenciones y se ha despedido personalmente y con abrazos de diversos ediles y líderes de grupo, pero no de Puigcorbé, al que no le ha dirigido la palabra al salir del salón de plenos pese a su intervención, a la que ningún otro concejal ha hecho referencia.

Joaquim Forn

En una intervención en el pleno, Bosch ha recordado la figura del también exconcejal del PDeCAT Joaquim Forn, "encerrado por hacer posible el voto y la libertad", y ha dicho que se marcha con la conciencia tranquila y limpia de haber hecho lo que creía mejor en cada momento, por lo que ha pedido disculpas a aquellos que puedan confundir las diferencias políticas con las personales.

"Tendré el mundo en la cabeza, pero la ciudad en el corazón", ha subrayado, y ha insistido en que nunca dejará de amar a la ciudad, por lo que ha pedido que el próximo alcalde de la capital catalana debe servir a la ciudad mejor de lo que él lo haría, y ha afirmado que él siempre estaré disponible para ayudar si se le necesita.

Elogios y peticiones

La alcaldesa, Ada Colau, le ha deseado suerte y aciertos y le ha recordado que el Ayuntamiento siempre será la casa de todos los concejales, y el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, le ha pedido no olvidar la impronta municipalista y ha dicho que en la Generalitat podrá cambiar de puntos de vista de ciertos asuntos, como el tranvía --que ERC rechazó-- ha bromeado.

El portavoz de su grupo municipal, Jordi Coronas, ha defendido que Bosch ha dado un nuevo significado a los conceptos de generosidad y al de lealtad, porque ha demostrado que se puede ser más leal al discrepar que al estar de acuerdo, y le ha garantizado que se puede "ir tranquilo" porque ERC tiene en Barcelona un gran equipo con asesores y consejeros de distrito, según él.

El líder municipal del PdeCAT y exalcalde, Xavier Trias, ha resaltado que "hoy en día entrar en el Govern de la Generalitat es un acto valiente", y Carina Mejías le ha pedido no hacer caso al presidente del Govern, Quim Torra, que le ha pedido explicar al mundo la situación de Catalunya, sino que trabaje por todos los catalanes y nunca olvide Barcelona.

Carmen Andrés (PSC) ha pedido que trabaje para que Barcelona sea una capital del mundo abierta y respetuosa con las diferencias, mientras que Alberto Fernández (PP) ha pedido que la Conselleria sea una herramienta de colaboración y suma desde la ley y el sentido común, y Eulàlia Reguant (CUP) le ha deseado suerte aunque ha criticado el "reparto de sillas" de ERC.