ESTRATEGIA POLÍTICA

Torra descarta ahora convocar elecciones tras la sentencia por el 1-O

El presidente de la Generalitat, Quim Torra.

El presidente de la Generalitat, Quim Torra. / ELISENDA PONS

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, descarta ahora convocar elecciones en Catalunya tras una eventual sentencia condenatoria del Tribunal Supremo en el juicio a los líderes y políticos independentistas. Así lo ha expresado en una entrevista con 'El Món', casi tres meses después de no cerrar la puerta a esta opción ("podría ser esta la respuesta (a las condenas)", dijo entonces.

"Sería irresponsable convocar elecciones, no me lo he planteado nunca, ni en este momento ni cuando haya las sentencias del Supremo. Pienso que la solución no pasa por unas elecciones, sino por cumplir el mandato que tenemos", ha dicho.

Torra ha insistido en que no aceptará unas sentencias que no sean absolutorias, aunque sigue sin precisar qué significa esto, y ha previsto que la sociedad catalana sabrá reaccionar ante el momento trascendental y lo afrontará como "un reto parecido al del 1 de octubre" del 2017.

Desobediencia

El presidente de la Generalitat contempla que, si el Supremo condena a los dirigentes soberanistas encausados, llegará el momento de desobedecer: "Tenemos que ser fieles al Parlament de Catalunya y esto implicaría desobedecer al Estado".

"La ciudadanía se tiene que organizar porque somos un pueblo adulto que ya no depende de aquello que el presidente de la Generalitat pueda decir. Nadie tiene que decir a ningún catalán que tiene que hacer, confío en el apoderamiento de la ciudadanía", ha concluido.

Ha admitido que vive una contradicción cuando visita a los presos soberanistas en cárceles gestionadas por la Generalitat, pero afirma que él no tiene las llaves de estos centros penitenciarios, sino que las tiene "la legislación española".

Avance electoral en España

Preguntado por un eventual avance electoral en España, ha dicho que "su última preocupación es quién gobierna España", ya que considera que tanto PP como PSOE ofrecen respuestas insatisfactorias para las aspiraciones soberanistas de Catalunya.

Ha lamentado que la situación de Catalunya ocupe una parte de la campaña electoral de las elecciones andaluzas, y ha dicho que a veces piensa que "merecería la pena ir a Andalucía a hacer una conferencia" para explicarse.

Torra ha asegurado que está dispuesto a ir al Congreso de los Diputados -la presidenta de la Cámara, Ana Pastor, llegó a ofrecérselo-, pero pide primero conocer las condiciones de su comparecencia: "Por ejemplo, si voy como invitado o como primer plato", parafraseando a Carles Puigdemont.

Unidad independentista

Ha asegurado que, pese a las discrepancias que se han visualizado entre JxCat y ERC en el Parlament, su Govern "mantiene una unidad más sólida" que en la Cámara catalana, pero ha admitido que existen disfunciones en las relaciones entre partidos independentistas.

También ha lamentado que la CUP haya reiterado que no comparte la estrategia soberanista actual y "se sitúe al margen del Govern", pero ha confiado en que todos los agentes podrán recuperar la unidad estratégica del independentismo.

Ha considerado "deseable" que los partidos independentistas se presenten en una lista unitaria a las elecciones europeas, en unas eventuales generales y también en las municipales, ya que ve clave esta unidad para que el proceso soberanista avance.

Ha explicado que no mantiene ningún contacto con la líder de Cs y jefa de la oposición en Catalunya, Inés Arrimadas, y ha criticado que no quiera reunirse con él en la Generalitat: "La crispación que lleva Cs a la vida política, civil y cultural en Catalunya nos hace mucho daño".

Asimismo, ha lamentado que en los plenos del Parlament se le siga llamando supremacista por sus polémicos artículos del pasado, y ha considerado que el presidente de la Cámara, Roger Torrent, debería haber actuado "desde el primer día" para que esto no pasara.