PROCESO JUDICIAL
Los agentes del 1-O se amparan en las "técnicas policiales" para justificar las agresiones a votantes
J. G. Albalat
Redactor
Ha trabajado en el Diario de Barcelona, El País y AVUI. Desde hace años en El Periódico cubriendo los acontecimientos judiciales. Premios Ortega y Gasset, Save the Children, Ramon Barnils y Josep Maria Planes por la investigación del 'caso Maristas' sobre abusos sexuales en los colegios. En el 2016, mención honorífica de la Generalitat en el Día de la Justicia. Colaborador de publicaciones jurídicas. Profesor asociado Master de Criminología de la Universitat de Barcelona.
J. G. Albalat
Los policías nacionales investigados por las cargas del 1-O se han amparado este miércoles ante el juez en "técnicas policiales" para justificar el golpe seco con el puño que recibió una persona en la cara en la escuela Dolors Monserdà-Santapau, en el barrio barcelonés de Sarrià, así como la acción de uno de los agentes de arrastrar a una mujer cogiéndola por la boca. Los imputados, además, han explicado que usaron la porra, incluso golpeando en la espalda a algunos concentrados, para intentar "limpiar" el perímetro de seguridad, según han asegurado fuentes jurídicas. El magistrado considera que alguna de esas actuaciones fueron "desproporcionadas".
Este miércoles han declarado cuatro agentes, uno de ellos inspector, que intervinieron en varios centros de votación del referéndum unilateral. Todos ellos han aludido a que se encontraron con una ambiente extremadamente tenso y "hostil" cuando salieron de las furgonetas.
Uno de los policías ha admitido que vio en la escuela Dolors Montserdà a una mujer con "un alto nivel de agresividad" y que le propinó un golpe de puño seco en la cara (se puede ver en el vídeo sobre estas líneas, en el minuto 2,10), una "técnica policial" que, a su entender, utilizó para "aturdirla". En su opinión, esta manifestante estaba alterada y "nerviosa". En un video se puede apreciar como esta persona antes pega a otro agente. "Esa persona optó por caer al suelo", ha sostenido el imputado, según fuentes de la acusación. Este "técnica" se denomina, incidió el policía, ATEMI (golpe rápido y seco).
El hecho de que otro policía agarrara a una persona por la boca y arrastrarla (a partir del minuto 2,55 del vídeo), según la versión ofrecida por los imputados al juez, es para poder sacarla del lugar y poder entrar en el edificio y así incautarse de las urnas y del material electoral, como les habían ordenado.
El uso de la porra
En los interrogatorios de este miércoles se han producido contradicciones entre los agentes. Un inspector ha explicado que las porras se utilizan solo cuando es en legítima defensa o cuando lo ordenan los superiores. Sin embargo, los otros tres funcionarios policiales han sostenido que su uso es según el criterio propio de cada agente. Los imputados han señalado esta vez que los mandos superiores que coordinaron el despliegue policial eran de los antidistrubios y de la brigada de información. A su entender, la actuación fue "proporcionada" ante una "masa organizada y violenta" que llevaba cascos de motos y paraguas o de personas que intentaban morderles.
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