EN TARRAGONA
La CUP denuncia que una empresa de "extrema derecha" controló el acceso del Concurso de Castells
Los anticapitalistas reclaman que la Diputación vuelva a gestionar el Tarraco Arena
Júlia Regué
Responsable de la sección de Política.
Graduada en Periodismo y en Ciencias Políticas por la Universitat Pompeu Fabra (UPF), ha desarrollado su carrera profesional en la sección de Política, donde se incorporó en noviembre de 2016. Ha seguido la actualidad política del Parlament de Catalunya y el día a día de varios partidos. También ha colaborado en programas de TV-3, Catalunya Ràdio y RAC1.
Júlia Regué
La CUP ha denunciado este lunes que una empresa "de extrema derecha" haya gestionado los controles de acceso a la Tarraco Arena Plaza, donde este fin de semana se ha celebrado el Concurso de Castells. La gestión del evento iba a cargo de la compañía Levantina de Seguridad, copropiedad de Jose Luis Roberto, presidente del partido de extrema derecha España 2000.
Algunos de los asistentes al evento han denunciado a través de las redes sociales que miembros del equipo seguridad lucieran tatuajes con símbolos nazis o fascistas que en la jornada del domingo habrían ocultado con camiseta de manga larga bajo el uniforme.
El edil de Reus y miembro de la Diputació de Tarragona, Edgar Fernández, ha apuntado en declaraciones a EL PERIÓDICO que algunos de ellos increparon a los asistentes y les retiraron banderas. "Me hablas en español, que soy valenciano", comentó uno de ellos a un casteller. Además, denuncia que algunos asistentes fueron "coaccionados" por trabajadores de esta empresa, que les habrían hecho comentarios sobre su vestimenta, según su versión.
Los anticapitalistas han cargado contra la administración de este equipamiento público, en manos hasta el 2023 de un conglomerado de empresas que mantiene vínculos con el exalcalde de Vila-seca y expresidente del ente, Joan Maria Pujals Vallvé al que acusan de "trato de favor". Por ello, han pedido la "internacionalización" del servicio, es decir, su gestión directa a manos de la Diputació de Tarragona, y han exigido que no vuelva a subcontratarse a la compañía Levantina de Seguridad. Y es que la CUP ya denunció el año pasado que el alquiler que pagaba la empresa para gestionar la Tarraco Arena Plaza era "irrisorio" y denunció presuntas irregularidades en la contratación del personal.
Por todo esto, reclaman que se inste la empresa que gestiona el equipamiento a rescindir toda relación comercial con Levantina de Seguridad. El grupo político de la CUP en la Diputació de Tarragona también ha puesto a disposición de los ciudadanos un correo (grup-cup@dipta.cat) por si alguien quiere denunciar "algún tipo de vejación o agresión por parte de miembros de esta empresa de seguridad".
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