Los ataques de la CUP a Interior enojan al PDECat

"La actitud de la CUP no ayuda mucho". Así se expresan dirigentes del PDECat respecto al nuevo episodio de confrontación directa con los que sobre el papel son los socios preferentes del Govern para tirar adelante la legislatura en el Parlament y, en especial, para su prueba más difícil: la aprobación de los primeros presupuestos del Ejecutivo de Quim Torra. Unas cuentas para las que los anticapitalistas han puesto un nivel de exigencias elevado.

El conflicto se ha destado cuando la CUP ha reclamado este miércoles la dimisión del 'conseller' de Interior, Miquel Buch, al que acusan de tibieza respecto a las acciones de grupos de ultraderecha en Catalunya a cuenta de los símbolos independentistas. Por este motivo, los anticapitalistas han reclamado a Buch que comparezca en el Parlament para dar explicaciones.

Radiografía de la extrema derecha en Catalunya

Las declaraciones del diputado cupaire Carles Riera a la ACN explicando su tesis han sido contundentes. Acusa a Buch de ser el "brazo ejecutor" dle ministerio del Interior y le ha conminado a poner la 'conselleria' y el cuerpo de los Mossos "al servicio de la defensa de los derechos democráticos del pueblo catalán". Es más, Riera, en un tono desafiante, ha añadido: "Si no escoge el lado adecuado pediremos su dimisión",  antes de criticar la posición "equidistante" de Interior respecto de los ataques "antidemocráticos" de la extrema derecha. En este sentido, ha lamentado que los Mossos ejerzan más acciones "preventivas" y "represivas" contra el movimiento independentistas que contra la extrema derecha. Según ha explicado el 'cupaire', su grupo ya pidió en julio la comparecencia de Buch por la "falta" de actuaciones de los Mossos en relación a los incidentes de los ultra.

Esta andanada llega tan sólo 24 horas después de que el mismo Riera acusara a los Mossos de llevar a cabo una "ejecución extrajudicial" en relación al joven atacante al que mató una mossa d'Esquadra en la comisaria de Cornellà. Esta tarde, tras acompañar al 'president' de la Generalitat, Quim Torra, a una visita a la comisaria de Cornellà, el 'conseller' de Interior ha contratacado las palabras de los cupaires: "Lamento que se usen según qué expresiones con una policía democrática de la que, las encuestas lo demuestran, este país está muy orgulloso y satisfecho del trabajo que hace", ha espetado Buch.

"Primero, que se informen"

Fuentes del partido posconvergente acusan a los cupaires de actuar sin informarse y sostienen que en la 'conselleria' se está trabajando a fondo en relación a los grupos ultraderechistas. Tampoco ha sentado nada bien en el PDECat las críticas de la CUP a lo sucedido en Cornellà, pese a que lo enmarcan en la tradicional "beligerancia" de los anticapitalistas respecto a las actuaicones policiales. "Se les olvida que venimos del 155, que nos estamos recolocando", afirman en el PDECat, y esperan que tenga lugar una comunicación mucho más fluida y directa entre los cupaires y el Govern en relación a estos asuntos. Con todo, asumen que "la CUP es la CUP". La polémica se ha manteido este miércoles en Twitter, con intercambio de reproches entre dirigentes posconvergentes y cupaires.

Poco después de las exigencias cupaires, este mismo miércoles, el 'president' mandaba una carta al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska exigiéndole que el ministerio tome cartas en el asunto ante la "escalada de violencia" en Catalunya por parte de "grupos violentos" con presenica en algú ncaso de agentes de la Guardia Civil o la Policía Nacional. Torra muestra su "preocupación" por lo sucedido. Horas más tarde, desde el mnisterio del interior se avanzaba la intención de convocar la Junta de Seguridad de Catalunya para abordar el conflicto creado por la colocación y retirada de símbolos amarillos.